jueves, 30 de mayo de 2024
Reconocimiento del Estado Palestino: Hasta cuando trata de hacer algo bueno, Sánchez lo hace mal
RECONOCIMIENTO DEL ESTADO PALESTINO: HASTA CUANDO TRATA DE HACER ALGO BUENO, SÁNCHEZ LO HACE MAL (30-V-2024)
El Gobierno español decidió en la reunión del Consejo de Ministros del pasado día 28 reconocer al Estado palestino como sujeto de Derecho Internacional. El reconocimiento es -según J.J. Salmon- un acto por el cual un Estado, al constatar una situación de hecho o de derecho, admite que ésta le es oponible. La existencia política de un Estado es independiente de su reconocimiento por lo demás Estados. Significa simplemente que el Estado reconocedor acepta la personalidad jurídica internacional del Estado reconocido con todos los derechos y deberes determinados por el Derecho Internacional. No obstante -como ha señalado José Ignacio Torreblanca-, en política internacional los derechos y los hechos no van siempre de la mano, sino que unas veces los hechos crean el derecho y otras el derecho crea los hechos. Aunque 143 países hayan reconocido a Palestina como Estado, es obvio que carece de los elementos básicos de la estatalidad. Cuando España reconoce a Palestina no está reconociendo el hecho, puesto que no existe fácticamente como Estado, sino el derecho garantizado por una resolución que aprobó la ONU en 1947 con la esperanza de que el derecho generara el hecho.
El reconocimiento de un Estado debe obedecer a motivos objetivos. Para que un Estado pueda reconocer a otro se requiere que éste reúna -según la Convención de Montevideo 00de 1930 sobre derechos y deberes de los Estados- la existencia de un territorio determinado, de una población permanente y de un Gobierno. El reconocimiento es discrecional pero no arbitrario y Palestina no reúne estos requisitos.
1.-Territorio: El Estado palestino carece de unidad y continuidad territorial. Está formado por una parte de Cisjordania bajo control de Israel, que la ha dividido en diversos “bantustanes” separados por muros de cemento e incomunicados entre sí, y por la franja de Gaza, situada entre Israel, Egipto y el Mar Mediterráneo. Israel ha sembrado Cisjordania con una red le asentamientos de colonos israelitas debidamente fortificados, y bien comunicados entre sí bajo el control del Tsahal. ¿Qué territorio ha reconocido el Gobierno de España al Estado palestino? Según Sánchez, la línea fronteriza marcada en 1937 por las resoluciones del Consejo de Seguridad 242 y 338, que comprende la totalidad de Cisjordania, Jerusalén-este y la franja de Gaza, comunicada con aquélla por un imaginario corredor a través de territorio israelita. Esas resoluciones no establecían ningunos límites sino que instaban a Israel a que abandonara los territorios ocupados. ¿Incluye los asentamientos judíos en Cisjordania? Yerra Albares cuando afirma que no es necesario reconocer a un Estado con unas fronteras concretas. El reconocimiento de un Estado no es un mercadeo, sino un acto muy serio y la doctrina internacional establece que han de fijarse los límites del territorio del Estado reconocido, tanto más si existen problemas de delimitación con Estados vecinos Si Sánchez concuerda con Yolanda Díaz en que había que reconocer a una Palestina desde el río -Jordán- al mar -Mediterráneo-, el territorio se ampliaría considerablemente. Según Rafa Latorre, Sánchez ignora todo sobre el Estado palestino y lo ha reconocido sin conocerlo, a diferencia de Yolanda que conoce perfectamente las coordenadas del nuevo Estado. Se trataría de un vasto territorio con un problemilla menor llamado Israel, que tendría que desaparecer. España en un Estado pionero, al ser la primera nación occidental que ha reconocido a través de su vicepresidenta -que no ha sido desmentida, ni desautorizada- el lema de la Carta fundacional de Hamas, que afirma que su principal objetivo es la destrucción de Israel. El Gobierno de Sánchez ha reconocido a un inexistente Estado y ni él mismo sabe con certeza qué es lo que ha reconocido. “Es un mero desiderátum acerca de un Estado del que solo se puede decir lo que debería ser”.
2.-Población: Palestina cuenta con una población que es de todo menos permanente. Tras la resolución de la ONU sobre la creación de Israel y de un Estado árabe en 1947, 711.000 palestinos tuvieron que abandonar sus hogares ( la “Nakba”), lo que ha sido calificado de “operación de limpieza étnica” por parte de historiadores como Benny Morris o Salman Abu Sitta . La Organización creó en 1949 la Agencia de las Naciones Unidas para Refugiados Palestinos en Oriente Próximo (UNRWA) con el fin de atender a estos desplazados. Se instalaron campamentos provisionales de refugiados en Gaza, Jordania, Líbano, Siria y Egipto, que -76 años más tarde- siguen en pie por culpa de la insolidaridad de estos Estados y de los ricos países del Golfo, y en los que se han criado en condiciones precarias cuatro generaciones de palestinos. La UNRWA definió a estos refugiados como las personas cuyo lugar de residencia habitual, entre junio de 1946 y mayo de 1948, era el Mandato británico de Palestina, y que perdieron sus hogares y sus medios de vida como consecuencia de la guerra árabe-israelita de 1948, así como sus descendientes. Israel ocupó el 26% de Palestina, Jordania la mayor parte de Cisjordania y Jerusalén-Este, y Egipto Gaza. En su resolución 194(II) de 1948, la Asamblea General reconoció el derecho de retorno a Palestina de los expulsados, pero Israel se ha negado a acogerlos. Después de la guerra de los 6 días (1967), Israel ocupó la mayor parte de Cisjordania, Jerusalén-Este y Gaza, y otros 430.000 palestinos fueron expulsados de sus tierras. La UNWRA fija hoy en 4 millones la cifra actual de refugiados palestinos. ¿Qué número de palestinos acepta el Gobierno español en el Estado que ha reconocido? ¿Incluye entre ellos a los refugiados de la diáspora?
3.-Gobierno: Para poder reconocer a un Estado es preciso que cuente con un Gobierno, pero en el ente fantasmagórico que España ha reconocido hay dos Gobiernos, sin contar al de Israel, que es quien realmente nevará alta. A partir de los Acuerdos de Oslo (1993 y 1994) ), la gobernación de Cisjordania y Gaza fue encomendada a la Autoridad Nacional Palestina (ANP), bajo la presidencia de Yasser Arafat. Israel apoyó el desarrollo de la facción fundamentalista de Hamas en Gaza para debilitar el liderazgo de Arafat, quien fue confinado a Ramallah y completamente aislado. Su sucesor, Mahmud Abbas -a) Abu Mazen- estableció un Gobierno incompetente y corrupto que a duras apenas ejerce las escasas competencias que el Gobierno israelita le deja. En 2005, Isrrael se retiró de Gaza y dejó el campo libre a Hamas, el cual ganó democráticamente las elecciones de 2006, accedió al Gobierno local, se desvinculó de la ANP y expulsó de la franja a los dirigentes de Al Fatah. Constituyó un Gobierno radical, impuso la aplicación de la Sharía e inició las hostilidades contra Israel, que culminaron con la masacre del 7 de octubre de 2023. ¿A cuál de estos dos Gobiernos ha reconocido Sánchez? ¿Al de Abu Mazem, que malgobierna en parte de Cisjordania, al que dirige el líder de Hamas, Ismael Haniya, que controla Gaza, o a los dos? ¿Acepta el Gobierno de una banda terrorista, que ha realizado crímenes de genocidio y de lesa humanidad?
No existe en la actualidad un Estado palestino que merezca ser reconocido de conformidad con el Derecho Internacional, por no cumplir con ninguno de los requisitos exigidos para su constitución en Estado, por mucho que haya sido reconocido por 143 Estados, y sea miembro de la UNESCO y observador en la ONU. La Asamblea General recomendó por una amplísima mayoría su admisión como miembro pleno derecho de la Organización, pero el Consejo de Seguridad rechazó esta propuesta al producirse el veto de Estados Unidos.
Cuestión bien distinta es que -como ha afirmado la ONU- el pueblo palestino tenga derecho a la libre determinación y a convertirse en Estado cuando cumpla las condiciones para ello. Estoy plenamente de acuerdo con ello y estimo que el pueblo palestino -al igual que el saharaui- debería poder ejercer libremente ese derecho. Creo que lo de que debería haber hecho el Gobierno español era reconocer formalmente el derecho de libre determinación del pueblo palestino -algo diente desde hace mucho tiempo- al contar para ello con el respaldo de todos los partidos representados en las Cortes, que en 2014 aprobaron una proposición no de ley a este respecto por 319 votos a favor, 1 en contra y 2 abstenciones. El pueblo español también está a favor de Palestina, ya que -según una encuesta del Instituto Elcano, el 78% se muestra de acuerdo con reconocer el Estado palestino y el 60% se pronuncia a favor de la fórmula de los dos Estados. Partiendo de este consenso, Sánchez podría haber abordado la cuestión de consuno con todo el arco parlamentario, pero, siguiendo su talante polarizador, ha preferido actuar en solitario -al margen de las Cortes, de la oposición y de la Unión Europea- y utilizar el sufrimiento del pueblo palestino como una baza electoral. Según “El Mundo”, Sánchez ha trasladado sus maneras polarizadoras en política nacional al ámbito exterior y usado un conflicto enquistado en una de las regiones más volátiles del mundo, a riesgo de enconarlo aún más. El líder de la oposición israelita, Yair Lapid, ha afirmado que “el reconocimiento unilateral de un Estado palestino por parte de España perjudica precisamente a aquellos de entre nosotros que creemos en la paz y en un proceso diplomático”, y lanzado a los palestinos el mensaje de que no debían combatir el extremismo ni el terrorismo. El problema del reconocimiento no está en el qué, sino en el cuándo y el cómo. Aunque los miembros de la UE sean favorables al reconocimiento de Palestina conforme a la fórmula de los dos Estados, ha prevalecido en la mayoría de ellos un sensato realismo, al estimar que, con el actual conflicto en Gaza, no es el momento adecuado. Sánchez ha fracasado en su intento, y solo ha conseguido el apoyo de Irlanda -amén del de Noruega, que no es miembro de la Unión-, pero, ajuicio de Ana Palacio, mediante la cuña divisoria introducida, ha propinado un golpe más a la necesaria concertación de voluntades en el seno de la Unión.
Con su habitual prosopopeya megalómana, Sánchez ha afirmado: “Quiero que los españoles estén satisfechos de que su Gobierno ha estado en el lado correcto de la Historia”. Ha necesitado 75 años para enterarse y otros 10 para acordarse de la recomendación del Congreso y los Gobiernos que han gobernado España durante todo este tiempo no han sido capaces de situar al país en el sitio correcto. El problema es que, si aplicamos las reflexiones de Sánchez “sensu contrario”, llegaríamos a la conclusión de que los países miembros del G-7 y otros -como Portugal, Bélgica, Holanda o Australia- están en el lado incorrecto de la Historiar y pueden ser considerados cómplices de la guerra en Gaza. Según David Mejía, tener reservas sobre la conveniencia del reconocimiento en estos momentos no equivale a oponerse a la paz.
¿Es viable la tesis de los dos Estados?
Sánchez no ha descubierto la pólvora, porque la tesis los dos Estados ya se encontraba ya en la resolución de la ONU que se creó el Estado de Israel. El problema es que ni los israelitas, ni los palestinos aceptaron esta fórmula, porque querían un Estado único para ello solos, y siguen pensando lo mismo a día de hoy. Joe Biden ha afirmado que Estados Unidos es partidario de esta tesis, pero la supedita hipócritamente a que se llegue a un acuerdo entre las partes, lo cual es imposible, porque, al menos una de esas partes, se opone firmemente y hace cuánto está en su mano para hacer inviable esa solución. Israel está por encima del bien y del mal y al margen del Derecho Internacional desde el mismo instante de su constitución como Estado por decisión de la ONU. Ha ignorado todas sus resoluciones , incluida la 181(2) de 1948 que lo reconoció como Estado, junto a otro palestino. La labor destructora de Palestina por parte de Israel y su éxito al impedir que se creara un Estado palestino ha sido magistralmente descrita por Nathan Thrall en su obra “Un día en la vida de Abed Salama”, que ha calificado su actitud de “necropolítica israelita”. Ha forzado la fragmentación de la población mediante el establecimiento de asentamientos judíos, carretera circundantes y zonas militares cerradas, y la construcción de una muralla de 700 kms de norte a sur de Cisjordania, que han dejado aisladas a las comunidades palestinas. Ha ejercido la violencia a escala cotidiana con el control de movimientos y el aislamiento. La negación de los derechos fundamentales, la política discriminatoria de vivienda, la incautación de tierras y la discriminación educativa han obligado a multitud de palestinos a abandonar sus tierras, que han quedado francas para la codicia de los colonos. Relata Thrall el significativo caso real del accidente de un autobús que llevaba de excursión a unos escolares palestinos, que causó la muerte de muchos de ellos, en parte debido a la tardanza en acudir de los bomberos y de los servicios de atención médica israelitas, en una zona en la que se impedía el libre movimiento de los servicios asistenciales de la ANP. Ante esta gravísima tragedia, adolescentes israelitas expresaron su alegría en las redes sociales. Hay que reconocer que, en paralelo, las familias y las escuelas palestinas inculcan en los jóvenes el odio a los israelitas y mantienen que los judíos solo merecen la muerte. En este ambiente de odio artificialmente cultivado por unos y otros ¿cómo se pueden crear dos Estados vecinos que convivan en paz y armonía?
Y tan culpables como los israelitas son los dirigentes árabes, que se han negado a reconocer la existencia de Israel, propugnado su destrucción y alentado a los nativos a que abandonaran los territorios ocupados por el Estado sionista, para luego arrojarlos sin medios en campamentos de refugiados en condiciones deplorables. Para poder implantar la fórmula de los dos Estados es condición “sine qua non” que todos los Estados árabes reconozcan a Israel y su derecho a la existencia, Hasta ahora, lo han hecho Egipto, Jordania, Sudán, Bahrein, Emiratos Árabes Unidos y Marruecos. Cuando estaba a punto de hacerlo Arabia Saudita y otros países del Golfo, se produjo el ataque de Hamas, incitado por Irán, presente en la región a través de las milicias terroristas de Hamas y Hizbollah -a las que rearma, financia y respalda políticamente-, precisamente para impedir que se produjera ese reconocimiento y, a fe de Alá, que lo consiguió.
La UE y otros países occidentales también han contribuido a la inaplicabilidad de la tesis de los dos Estados -que defienden en teoría, pero que hacen bien poco para que se lleve a cabo- con su política de respaldo incondicional a Israel Especialmente notorio es el caso de Estados Unidos, que -veto en ristre- impide que la ONU aplique sanción alguna Israel, pese a las continuas violaciones de sus resoluciones y del Derecho Internacional. El caso se ha puesto de flagrante manifiesto con la campaña bélica contra Gaza y su inocente población civil. Nadie niega el derecho de Israel a la legítima defensa tras la agresión de Hamas, pero este derecho no es absoluto, sino que ha de ser proporcionado, y las autoridades de Israel -especialmente su primer ministro, Benjamín Netanyahu, personalmente interesado en continuar la guerra para mantenerse en el poder- han excedido los límites de la autodefensa y violado todas las normas del Derecho Internacional y del Derecho Humanitario, aunque que no haya realizado actos de genocidio, como le han atribuido irresponsablemente la ministra de Defensa, Margarita Robles -que ha sacado sus desgastados galones de magistrada para ponerse por encima de los jueces del Tribunal Internacional de Justicia- y la vicepresidenta Teresa Ribera. Israel ha cometido en Gaza crímenes de guerra y de lesa humanidad, pero no actos de genocidio, ya que no cabe detectar en sus actuaciones el elemento definitorio de la intención de destruir total o parcialmente a un grupo nacional por motivos étnicos, raciales o religiosos. Hay además un argumento fáctico innegable, dado que, lejos de haber acabado con la población palestina, ésta se ha triplicado. Israel sería un genocida bastante incompetente. Aplicando el principio de reciprocidad, el ministro israelita de Asuntos Exteriores, Israel Katz, ha acusado a Sánchez de ser cómplice de incitar el genocidio judío por reconocer el Estado palestino y no destituir a la vicepresidenta Díaz por decir que Palestina sería libre desde el río hasta el mar.
A lo máximo a que ha llegado TlJ ha sido a afirmar que la actuación de Israel en Gaza podría llegar a producir actos de genocidio y a pedirle que tomara las medidas necesarias para impedirlo. Más recientemente le ha instado a que suspenda de inmediato sus ataques en Rafah. Las autoridades israelitas han hecho caso omiso a esta decisión -que es vinculante para Israel- y, si se pidiera al Consejo de Seguridad que obligara a Israel a cumplir la decisión del Tribunal, Estados Unidos lo impedirá recurriendo al veto. El incumplimiento por parte de Israel de sus obligaciones como miembro de la ONU y la arbitrariedad de su proceder culminaron el día 27 con un ataque con misiles a un edificio en la zona humanitaria de Al Mawasi cercano a un campamento de tiendas de campaña -montado provisionalmente para albergar a unos civiles que han sido trasladados caprichosamente de un lado para otro por las tropas israelitas-, que provocó 45 muertos y más de 100 heridos, al incendiarse las lonas del asentamiento. Netanyahu ha dicho que se ha tratado de un “trágico error” consecuencia de una guerra y que se haría la debida investigación. La Fiscal-jefe del Ejército, Yifat Tomer, ha justificado el bombardeo, al afirmar que se efectuó contra los comandantes Yasi Rabia y Jaled Nagar ”con munición precisa y de conformidad con el Derecho Internacional” (¿?). Para Israel la muerte de dos dirigentes de Hamas compensaba que se produjeran cientos de muertos y heridos civiles. Para mí, como profesor de Derecho Internacional, es una novedad saber que, entre las amplias funciones de esta rama del Derecho, figura la de definir los bombardeos de precisión en un conflicto armado.
El cerco judicial contra Israel se ha cerrado con la decisión del fiscal-jefe de la Corte Penal Internacional, Karim Khan, de emitir órdenes internacionales de detención contra Netanyahu y el ministro de Defensa israelita Yoav Gallant, no por un delito de genocidio, sino por crímenes de guerra y de lesa humanidad. El fiscal ha lanzado también órdenes similares contra los líderes de Hamás Ismail Haniya, Yahia Sinwar y Mohamed Deif. A los dirigentes israelitas les ha acusado de homicidio intencional, ataques a la población civil y uso del hambre como arma de guerra. Este último -junto con el tratamiento infame a más de un millón de civiles a los que se ha obligado a abandonar sus hogares y a deambular por el territorio bajo una lluvia de bombas- son los elementos más repugnantes de la actuación israelita liderada por Netanyahu.
Actitud de España: Declaración institucional de Sánchez
El presidente del Gobierno hizo las 8:30 horas del día 28 una Declaración institucional, que contenía los siguientes elementos:
1.-Se trata de una decisión con el objetivo de contribuir a que israelitas y palestinos alcancen la paz. Israel piensa justo lo contrario, como cabe deducir de los comentarios de sus máximos dirigentes. Según el ministro Katz, la Historia recordará que España colgó una medalla de oro a los asesinos de Hamas que violaron a chicas y quemaron a bebés. Israel no lo dejará pasar en silencio y tendrá graves consecuencias .
2.-La única manera de lograr un futuro en paz es un Estado palestino que conviva junto a un Estado israelita en paz y seguridad. Es una idea muy loable que ya ofreció la ONU en 1947 y que, 77 años más tarde, sigue mostrando su carácter ilusorio.
3.-El Estado de Palestina debe ser viable con Cisjordania y Gaza conectadas por un corredor, y unificadas bajo el Gobierno legítimo de la ANP. Y si no se construye ese corredor ¿dejaría de ser viable el nuevo Estado? Habría que construir decenas de corredores para comunicar los bantustanes establecidos en Cisjordania y derribar el muro de 700 kms que los separa. Sobre la legitimidad de la ANP, baste recordar que Hamas ganó las elecciones en Gaza y probablemente las volvería a ganar.
4.-Es una decisión que no adoptamos contra nadie y menos aun contra Israel. No parece que éste opine lo mismo, pues ha retirado a su embajadora en Madrid, sacado un video delirante en el que mezcla el flamenco y el terrorismo, afirmado que el reconocimiento no promueve la paz sino que da un impulso a Hamas, y prohibido a la Embajada en Tel Aviv y al Consulado General en Jerusalén que atiendan a los palestinos.
5.-La decisión refleja el rechazo frontal del Gobierno español a Hamas, que está en contra de la solución de los dos Estados. También lo están Israel y muchos países árabes, por lo que cabe deducir que el rechazo se extiende a todos ellos. Pese a esta condena, Hamas ha expresado su agradecimiento a Sánchez. Se ha producido la incongruencia de la visita a Madrid de los ministros de Asuntos Exteriores del Grupo de Contacto Árabe para Palestina para celebrar el acto de España y el éxito de la tesis de los dos Estados, cuando dos de ellos -Arabia Saudita y Qatar-no reconocen a Israel.
6.-La decisión se basa en el Derecho Internacional. No parece que la decisión esté muy en consonancia con la Convención de Montevideo de 1930 y sus requisitos para que se pueda producir un reconocimiento conforme a Derecho. La Declaración es una pompa de jabón electoral, vacía de concreción y contenido.
Según ha escrito Enrique Calvet en “Mundo Financiero”, el reconocimiento se ha hecho de forma agresiva, acusando a Israel de genocidio y ocultando el muy brutal origen terrorista del inicio del conflicto armado, y llegando incluso a justificarlo tras la afirmación de la vicepresidenta Díaz. Hasta la servicial RTVE ha calificado a Hamas de “milicia armada del movimiento palestino” ¿Por qué se ha decidido provocar exagerada e innecesariamente a Israel en este momento? ¿No se deberá, por un casual, a cálculos electorales? La decisión del Gobierno es –a juicio de Arcadi Espada- una victoria política de Hamas y ha puesto de manifiesto que la atrocidad cometida el 7-O ha sido útil y que el terrorismo es rentable. Feijóo ha manifestado en Onda Cero que el reconocimiento –que se produce en el momento más inoportuno- ha supuesto un premio a Hamas y, en vez de beneficiar al pueblo palestino, lo perjudica. Abascal ha acudido en auxilio de Netanyahu y lo ha tranquilizado al asegurarle que él deshará el entuerto cuando Vox llegue al Gobierno.
El pueblo palestino tiene derecho a la libre determinación y a la independencia, y esto es lo que debería haber proclamado el Gobierno, en vez de reconocer a un Estado inexistente, que no cumple con ninguno de los requisitos de estatalidad requeridos por el Derecho Internacional. Pese a la opinión de Sánchez -con su menosprecio por los que no piensan como él-, los Estados que no han reconocido al Estado palestino no están en el lado equivocado de la Historia, ni son contrarios a la paz en Gaza. ¿No será Sánchez quién, con su decisión unilateral y unipersonal, esté situando España en el lado incorrecto de la Historia? Hasta cuando Sánchez trata de hacer algo bueno, lo hace mal.
jueves, 23 de mayo de 2024
Sánchez estima que las afrentas a una persona particular afectan a la seguridad y a la dignidad nacionales
SANCHEZ ESTIMA QUE LAS AFRENTAS A UNA PERSONA PARTICULAR AFECTAN A LA SEGURIDAD Y A LA DIGNIDAD NACIONALES
Según José Manuel Albares, la seguridad y la dignidad nacional están en peligro por las declaraciones del más alto dignatario argentino. El ministro de Asuntos Exteriores ha desencadenado -a instancias de su jefe Pedro Sánchez- una tormenta en una taza de mate, y el triángulo de las Bermudas de esta tragicomedia está integrado por el presidente de la República Argentina, Javier Milei, la esposa del presidente del Gobierno español, Begoña Gómez, y su ilustre marido, que ha aprovechado la coyuntura que le ha servido en bandeja su acérrimo enemigo, Santiago Abascal -experto en proporcionarle balones de oxígeno en momentos delicados- para tratar de mejorar la posición del PSOE con vistas a las elecciones europeas.
El agresor verbal Milei
Milei es un personaje muy peculiar, que ha conseguido acceder a la presidencia de la República Argentina democráticamente, frente a la omnipotente máquina del peronismo. Economista inteligente y deslenguado, es un ultraliberal con tintes anarcoides, que -tras haber ganado las elecciones generales- ha decidido aplicar una purga de caballo a Argentina, para tratar de superar la situación de inestabilidad política, hiperinflación, crisis económico-financiera y pobreza creciente en uno de los países más ricos del planeta venido a menos por la incuria peronista. Y no solo pretende liderar a su país, sino ser uno de los referentes máximos de la ultraderecha a nivel mundial. Sus conciudadanos le conocen, no sin razón, como “El Loco”.
El presidente sorprendió a la élite económica mundial del Foro de Davos con un discurso en el que afirmó que Occidente estaba en peligro, porque quienes debían defender supuestamente sus valores tenían una visión del mundo que conducía al socialismo. Cambiaron el modelo de la libertad por distintas versiones del colectivismo, que nunca puede ser la solución. El capitalismo de libre empresa es un sistema posible para terminar con la pobreza y el único moralmente deseable para lograrlo, y -gracias a él- el mundo se encuentra en su mejor momento de prosperidad. Propugnaba un libertarismo basado en la defensa de la vida, de la libertad y de la propiedad. Occidente se hallaba en peligro porque sus líderes estaban abriendo las puertas al socialismo, con lo que condenaban a la sociedad a la pobreza, a la miseria y al estancamiento. El socialismo ha sido un fracaso en lo económico, en la social y en lo cultural, y además ha asesinado a más de cien millones de seres humanos. Si no se combatiera, tendríamos más Estado, más regulación y más pobreza, menos libertad y peor nivel de vida. “El Estado no es la solución. El Estado es el problema”.
Según el politólogo argentino Leonardo Orlando, Milei es un líder dominante de lenguaje violento, con insultos y amenazas al adversario y signos de carencia de empatía -su emblema es una motosierra- y, pese a ello, ha encarnado el liderazgo en Argentina. Es un provocador nato que va con la descalificación por delante. Ha dicho del Papa Francisco que es la encarnación del maligno en la tierra, del presidente colombiano Gustavo Petro que es un terrorista asesino, y del presidente mejicano AMLO que es un ignorante. Que califique a Sánchez de lacra y a su esposa de corrupta es “pecata minuta”. Tras el insulto del ministro de Transportes, Óscar Puente, que lo calificó de drogadicto, la Oficina Presidencial expidió un comunicado en el que calificaba de injuriosa y calumniosa esta afirmación, y señalaba que Sánchez ponía en peligro la unidad de España por pactar con los separatistas, y que tenía problemas más importantes de qué ocuparse, como las acusaciones de corrupción a su esposa, asunto que le había llevado a evaluar su renuncia al cargo. En su mitin en apoyo a Abascal en el Festival “Viva24” ante la “crème” de la extrema derecha -Marine LePen, André Ventura, José Antonio Kast, Giorgia Meloni, Viktor Orban y Mateuzs Morawiezki-, Milei se apartó de las cuartillas de su discurso e improvisó uno de sus exabruptos, al referirse al presidente del Gobierno como ” lacra que se aferra al poder” y a su esposa como “corrupta”. No mencionó ningún nombre, pero las señas eran mortales.
La conducta de Milei es reprobable, tanto por el fondo, como -especialmente- por la forma. El presidente argentino violó las normas de la “comitas gentium”, de las “mores diplomáticas” y de la simple educación cívica. Un alto dignatario no puede insultar a un colega o una simple ciudadana, y menos en su propia tierra. El populismo -sea de derechas o de izquierdas- contamina hasta las buenas costumbres. No cabe apreciar en su proceder circunstancias eximentes, aunque sí atenuantes, porque el que comenzó a operar la máquina del fango fue el maquinista Sánchez.
La supuesta agredida, Begoña Gómez
Begoña Gómez es una avispada empresaria, profesora de la Universidad Complutense “por la escala de tierra”, y esposa del presidente el Gobierno, a cuya sombra ha hecho prósperos negocios. Para ser profesor titular de una Universidad pública es preciso tener un doctorado, salvo en el caso de la señora de Sánchez, que -por sus notables éxitos académicos- ha logrado ser nombrada como encargada de cátedra, sin siquiera tener un título oficial de licenciada. Está al frente de la cátedra de Transformación Social Competitiva en la UCM y fue directora del África Center del Instituto Empresa, pese a su magro “currículum vitae”.
Los diarios “El Confidencial” y “The Objective” publicaron noticias sobre la conducta poco ortodoxa de Gómez en el ámbito de su actuación empresarial, tales como que 1) la empresa Inmark Europa, de la que era socia, recibió un crédito del Gobierno de €750.000; 2) el Áfrican Center -del que era directora- obtuvo una subvención anual de €40.000 de la empresa Globalia, con cuyo CEO, Javier Hidalgo, y el conseguidor Víctor de Aldama, se reunió en varias ocasiones para hablar de negocios; 3) la compañía ”Air Europa” -propiedad de Globalia- fue rescatada por el Gobierno con créditos de €795 millones; 4) Gómez firmó sendas cartas de apoyo a unas peticiones de subvención a la UTE formada por Valley Digital e Innova Next -propiedad de Carlos Barrabé, financiador de su cátedra-, y la unión empresarial obtuvo subvenciones públicas por valor de €12,1 millones; 5) el Ministerio de Transición Ecológica otorgó una ayuda de €96.397 a un proyecto dirigido por Gómez; 6) la señora de Sánchez ha acompañado a su marido en varios viajes oficiales, con agenda propia para atender a sus asuntos. Son hechos comprobados que no han sido desmentidos, y no -como ha afirmado su marido- “fango, difamaciones y bulos’.
La ONG Manos Limpias presentó una querella contra Gómez por un posible delito de tráfico de influencias, basada en las noticias de prensa. La asociación Hazte Oír formuló otra querella, jurídicamente bien fundamentada y con aporte de sólidos elementos de prueba. La Fiscalía de Madrid estimó que era necesario investigar los hechos y remitió el sumario al Juzgado n° 41, que había admitido a trámite la querella de Manos Limpias. El juez Juan Carlos Peinado ha recibido el testimonio de los periodistas que publicaron las noticias, los cuales han acreditado documentalmente la veracidad de sus afirmaciones, y ha citado como testigo a Barrabé. El juez está recibiendo presiones y amenazas de todo tipo por haber osado iniciar diligencias a raíz de las querellas presentadas contra Gómez, un caso al que se ha incorporado Vox como acusación particular con el objetivo de incordiar.
En un artículo publicado en “El Debate” sobre “!Arréglame esto ya!”, Luis Ventoso ha descrito en los siguientes términos un ficticio diálogo familiar:
-X: Me tienes que arreglar esto ya. La cosa no solo no mejora, sino que va peor.
-Z: He hecho todo lo que está en mi mano, pero las cosas llevan su tiempo. He jugado muy fuerte por ti: La carta, los días de meditación poniendo el cargo en el alero…
-X: Lo único que has conseguido es que en el extranjero -donde no sabían nada de la movida- ahora se ha enterado todo el mundo. Alguna manera tendrás de presionar al juez ese. Mueve a Álvaro, a Félix. Espabila en el control del Poder Judicial. Si sacaras adelante de una vez lo de que instruyan los fiscales en vez de los jueces, problema resuelto. Todo dependería de Álvaro, quien a su vez depende de ti, y está dispuesto a hacer lo que haga falta.
-Z: Estoy en ello, pero ahora tengo mil frentes abiertos. Ahí está ese loco de Puigdemont que quiere gobernar en Cataluña sin haber ganado las elecciones.
-X: Bueno, como tú.
-Z: Déjate de coñas, lo mío es distinto. Encabezo una coalición progresista que es mayoritaria. Ese tipo es incontrolable y, si se pone farruco, nos puede retirar sus apoyos y nos cerrarán la tienda.
-X: Pero eso no te impide moverte con lo mío. Imagínate que el juez le da por imputarme y yo no estoy aforada.
-Z: Eso no va a pasar, es impensable. Nuestras TV y PRISA ya están apoyando a tope y estoy forzando muchísimo la máquina del fango. Con esto de amenazar a los jueces y a los periodistas me pueden dar un toque desde Bruselas. Estoy haciendo entrevistas en nuestras radios y teles dando la cara por ti. Circulo “bulos” todos los días y los pongo a parir. Óscar está empezando a zumbar a los periodistas por sus nombres y apellidos.
-X: Ponte las pilas porque yo no quiero salir de aquí de ninguna manera -y menos humillada-, por haber hecho unos negocios que son perfectamente normales. Ya me dirás por qué no puedo recomendar por carta a un amigo que me ha ayudado en mi cátedra y a mantener mi vida profesional.
-Z: Eres injusta conmigo. Ningún otro mandatario de todo el planeta ha escrito una carta pública de expresión de amor a su mujer como la que yo te he dedicado.
-X: Venga, venga. Menos sacarina y más acción, que la cosa está muy chunga. No creo que sea tan difícil cerrar esos periódicos y sacar de ahí a esos jueces. Has hecho cosas peores y al final no ha pasado nada. Por favor, mueve el culo, que esta vez nos hemos metido en un buen lío. Como en las películas, cabe advertir que todo parecido con la realidad es pura coincidencia, pero hay veces en que la ficción es más real que la pura realidad. “Si non é vero, ben trovato”.
El cisne blanco Sánchez, paladín enamorado de la agredida
Sánchez ha vertido lágrimas de cocodrilo ante la incalificable afrenta de Milei a su mujer y -de pasada- a él mismo, y se ha quejado amargamente de la injusticia de una conducta que viola las más elementales normas de la diplomacia, y pone en peligro las relaciones entre España y Argentina. Olvida, sin embargo, que fue él quien comenzó las hostilidades. Pese a sus lastimeras acusaciones a Milei de intromisión en los asuntos domésticos de España, Sánchez envió un de video apoyo al candidato peronista a las elecciones presidenciales argentinas, Sergio Massa, del que afirmó que -frente a la estridencia- representaba la tolerancia y el diálogo para construir una Argentina que no dejara atrás a nadie –“¡Ojalá que gane Massa!”-, y envió a Buenos Aires a Yolanda Díaz para que hiciera campaña por él. De Milei dijo que, con su delirante discurso reaccionario, había arrollado a la tradicional derecha argentina. En su discurso de investidura, Sánchez prometió levantar un muro frente a la derecha reaccionaria, en la que incluía a Milei, al que definió como el líder de la ultraderecha en Argentina.
El punto álgido lo marcó su rotweiler Oscar Puente, cuando comentó que “he visto a Milei en una tele y dije, según le estaba oyendo no sé en qué estado, previa a la ingesta o después de la ingesta de no sé qué sustancias, y salió decir aquello, y yo dije, es imposible que gane las elecciones, cavó su fosa”. El ministro de Transportes estuvo tan acertado en su pronóstico como su correligionario José Félix Tezanos, y Milei ganó como Messi por goleada. El Gobierno argentino pidió al español que el ministro rectificara y pidiera perdón, pero Sánchez respaldó a su energúmeno, quien se limitó a afirmar que, si hubiera sabido la repercusión que tendrían sus palabras, no las habría pronunciado. Sánchez no se dignó felicitar a Milei tras su triunfo, y ni siquiera envió a un miembro de su Gobierno para que acompañara al Rey en su toma de posesión. Lo ha insultado públicamente en diversas ocasiones y ha instado a sus ministros a que hicieran lo propio. Así, la ministra Diana Morant ha salido de su insignificancia para afirmar que Milei era el gran defensor de los regímenes fascistas.
Sobreactuación del Gobierno español e inexplicable declaración institucional
Tras la gamberrada de Milei, el Gobierno español se rasgó las vestiduras y Albares hizo una solemne y dramática declaración institucional ante semejante afrenta, en la que afirmó que “las gravísimas palabras pronunciadas por Javier Milei en Madrid sobrepasan cualquier tipo de diferencias políticas e ideológicas, no tienen precedentes en la historia de las relaciones internacionales y aún menos en la historia de las relaciones entre dos países y dos pueblos unidos por fuertes lazos de hermandad”. Al trato de consideración que el Gobierno le había dado, Milei respondió con “un ataque frontal a nuestra democracia, a nuestras instituciones y a España”. Destacó que Milei había llevado las relaciones entre España y Argentina a la situación más grave en la Historia reciente y, por ello, había llamado a consultas a la embajadora de España en Buenos Aires “sine die”. Exigió a Milei disculpas públicas y -en el caso de que éstas no se produjeran- “tomaremos todas las medidas que creamos oportunas para defender nuestra soberanía y dignidad”. Asimismo le exigió respeto a las formas debidas entre naciones, que excluían la injerencia en los asuntos internos de otros Estados, unas formas y un respeto que jamás debería haber abandonado, tanto mas cuanto que lo hacía en la capital de España.
En mis 60 años de profesor de Derecho Diplomático no he visto, ni en los tiempos más oscuros del franquismo, un disparate tan fenomenal como esta declaración institucional. Hay pocas cosas en las que concuerde, tanto con la forma como con el fondo de dicha declaración, salvo en que la actuación de Milei ha supuesto una importante quiebra en la forma de comportarse con respecto a un país hermano, y en que era un hecho sin precedentes, pero lo que carece de precedentes es el comportamiento del Gobierno español. Jamás en las relaciones entre España y sus antiguas provincias ultramarinas se había recurrido a este extraordinario procedimiento y además por una nimiedad. La fórmula es completamente inhabitual, porque -cuando se produce una fricción entre dos Estados amigos-, lo normal no es dar tres cuartos al pregonero y sacar la ropa sucia a la luz pública, sino tratar de resolver el problema de la forma más discreta posible. Hay toda una escala de medidas formales para tratar de resolverlo con discreción: convocatoria del embajador ajeno para hacerle una admonición o presentarle una protesta, llamamiento en consulta al embajador propio, retirada de dicho representante de forma permanente, rebaja -de facto o de jure- del rango del jefe de la misión, e interrupción o ruptura de las relaciones diplomáticas.
¿En qué situación estamos en la actualidad? Creo que ni el propio Gobierno lo sabe, pues se ha dejado llevar más por la visceralidad que por la racionalidad, y no va a ser fácil dar marcha atrás. Parece ser que se ha producido una rebaja de hecho de la jefatura de la Misión española en Buenos Aires, que no va a ser imitada en reciprocidad por el Gobierno argentino, como ha puesto de manifiesto su Canciller, Diana Mondino, que ha tratado de quitar importancia al asunto, al señalar que se trataba de un enfrentamiento de personalidades y no de un conflicto diplomático entre los dos países. Albares ha amenazado con tomar medidas adicionales si Milei no se disculpaba, lo que no va a hacer ¿Cuáles pueden ser estas medidas? La prensa ha hablado de negarle la entrada cuando pretenda venir el 21 de junio a recoger el premio Juan de Mairena, que le ha sido concedido por su defensa del liberalismo, o declararlo “persona no grata”. Lo primero no es factible, porque cualquier argentino con un pasaporte en regla tiene derecho a entrar en España sin necesidad de visado ¿Lo van a detener? Milei ha retado a Sánchez a que lo haga y le ha preguntado qué cantidad de totalitarismo tiene en su sangre. Respecto a lo segundo, Milei no es un diplomático acreditado ante el Estado español, por lo que difícilmente podría ser declarado “persona non grata”. La siguiente fase sería la ruptura de relaciones diplomáticas y Albares no la ha excluido, aunque no creo que se produzca ¿Va a declarar España la guerra a Argentina como “ultima ratio”? Con Sánchez todo es posible. Si la guerra de Troya empezó por el rapto de Helena por Paris, la guerra del Plata podría iniciarse por la afrenta de Milei a Begoña.
Sánchez no encuentra motivos para retirar a su embajador en Rusia pese a la invasión de Ucrania, ni al acreditado en Israel a pesar de las masacres en Gaza. Aún menos a los representantes en Venezuela o en Méjico, pese a los reiterados insultos de Maduro y de AMLO al rey Felipe VI y a España. La única que lo merece es Argentina, por haber cometido Milei un crimen de lesa “sanchidad”.
Discrepo de la mayoría de las afirmaciones contenidas en la declaración: 1) Que Miley llame corrupta a una persona privada no supone un ataque a España ni a su soberanía. 2) No se ha producido un ataque a las instituciones españolas, a menos que Sánchez considere que su esposa es una institución del Estado. 3) Las palabras de Milei no han afectado en modo alguno a la dignidad nacional, a lo sumo, a la dignidad personal de Sánchez y de su consorte. 4) Decir que Sánchez es una lacra que se aferra al poder no es una afrenta a la Nación. Si resulta adecuada o no esta calificación -nada que ver con la de drogadicto- es cuestión de gustos, pero es innegable que se aferra al poder, como lo demuestra la concesión de la amnistía a unos delincuentes catalanes a cambio de que lo mantengan en la Moncloa. 5) Lo que sobrepasan los limites de las diferencias políticas e ideológicas son las críticas del Gobierno a Milei y a la oposición española de ultraderechistas y fascistas. 6) Lo que es un caso único sin precedentes es la retirada permanente de un embajador acreditado ante un país hermano por una nadería.
El conflicto ha consistido en un problema personal fruto del enfrentamiento de dos inconmensurables egos, que se retroalimentan, pues son enemigos ideales y a Sánchez le viene bien sacar a pasear al fantasma de la ultraderecha -como ha hecho a menudo con la momia de Franco- para fortalecer la posición del PSOE en las elecciones europeas. Albares ha convertido una cuestión personal en un problema diplomático, político e incluso económico, y supeditado los intereses generales de la Nación a los intereses personales de Sánchez y electorales de su partido, pasando por alto la existencia de 500.000 españoles en Argentina, la presencia de 117 importantes empresas españolas, el hecho de que España sea el segundo inversor mundial en el país, y el importante intercambio comercial entre los dos Estados. Incluso la vicepresidenta Díaz ha criticado a los empresarios españoles por haberse reunido con Milei en Madrid.
Esta utilización espuria de la política exterior -que es la política de Estado por antonomasia- para fines políticos de partido ha sorprendido y disgustado a la mayoría de los miembros de la carrera diplomática, cada día más politizada, como demuestra que tres de los cuatro secretarios de Estado no sean diplomáticos y el creciente nombramiento de exministros y altos cargos socialistas para importantes misiones diplomáticas, para la que no estaban capacitados. La bofetada a Argentina por razones partidistas excede cualquier límite tolerable. Echo de menos una declaración de la mayoritaria Asociación de Diplomáticos Españoles que ponga los puntos sobre las íes.
El tema básico sobre el tapete es la conducta poco ortodoxa de Begoña Gómez y el silencio culpable del presidente del Gobierno, quien -en la comparecencia de ayer en el Congreso- habló muy someramente del tema, no dio explicación alguna, ni contestó a ninguna de las cien preguntas que le había formulado el PP. Repitió que, para quebrarlo y sacarlo del Gobierno, la ultraderecha, las fuerzas oscuras y los pseudo medios de comunicación atacaban a su esposa con mentiras y bulos, recurriendo a la ”máquina del fango”, cuando su mujer era una profesional honesta, seria y responsable. Ante el obstinado silencio del presidente, Feijóo le indicó que, si no daba explicaciones en el Congreso, tendría que darlas en el Senado. Será el juez competente quien decida si Gómez ha cometido o no un delito de tráfico de influencias, pero de lo que no cabe duda es que su activa y exitosa actuación empresarial es poco decorosa y atenta a los principios de la ética y de la estética.
En su artículo en “El Mundo” sobre “La mujer del presidente sí es un asunto de Estado”, David Lema ha incluido una supuesta epístola de Sánchez a la ciudadanía, en la que explica qué ocurriría si Begoña fuera condenada. “Me vería forzado a dimitir y no habría mayor desastre para mi Estado, no habría mayor fuga para mi democracia, y no habría mayor crimen para mi España”. Ha habido ciudadanos que “han llorado en el pasado por mi sufrimiento y el de Begoña. Quizás crean que colocar a mi mujer en el centro de un conflicto internacional puede ocasionar más dolor, pero es que aquí no rige la razón sino el corazón, y yo soy un hombre profundamente enamorado”. Por eso, habría que pedirle a Sánchez que cumpliera con su propio llamamiento a acabar con la crispación, pero -como ha observado Jorge Bustos- su disimulo duró un minuto, y pronto se cansó de su papel de Gandhi, hundió la zarpa en la charca cainita y se dedicó a rociar de barro a la oposición. La gente de bien debería salir en masa a la calle el próximo día 26 para mostrar su frontal oposición a una Ley de Amnistía inicua y a la política de entrega de Sánchez a los partidos independentistas.
Madrid, 23 de mayo de 2024
viernes, 17 de mayo de 2024
Aunque el independentismo haya perdido la mayoría en el Parlament, el Gobierno sigue sometido a su chantaje
AUNQUE EL INDEPENDENTISMO HA PERDIDO LA MAYORÍA EN EL PARLAMENT, EL GOBIERNO SIGUE SOMETIDO A SU CHANTAJE
El pasado 12 de mayo se celebraron en Cataluña las elecciones autonómicas, con una participación del 57.96%, 6.61 puntos más que en 2021. El 42.04% de abstenciones fue una de las cifras más elevada de su historia. Los comicios fueron ganados por el (+12)Puigdemont por Cataluña” 672.438 (21.64%) y 35 (+3), ERC 425.055 (13.68%) y 20 (-13), PP 340.769 (10.97%) y 15 , Vox 247.181 (7.95%) y 11 (=), En Común 180.595 (5.81%) y 6 (-2), la CUP 127.195 (4.09%) y 4 (-5), y Alianza Catalana 117.928 (3.79%) y 2 (+2). Quedaron fuera del Parlamento Ciudadanos, que solo consiguió 22.481 votos (-6) -y quedó por debajo del PACMA- y Aurora, el partido de Ponsatí.
Campaña electoral
Todos los sondeos daban como ganador al PSC de Salvador Illa y preveían un mano a mano entre ERC -liderada por el presidente de la Generalitat,
Pere Aragonés- y Junts -bajo la batuta del prófugo Carles Puigdemont, que realizó su campaña desde la Cataluña-norte- para ver quién asumía el liderazgo del independentismo. El comienzo de la campaña se vio alterado por el desembarco de Pedro Sánchez, tras su maniobra de enviar una carta a la ciudadanía en la que se daba cinco días para reflexionar sobre sí valía la pena continuar fungiendo como presidente del Gobierno. Aclaradas sus hamletianas dudas, se plantó en Cataluña -donde dejó a Illa en un segundo plano- para hacer frente a Puigdemont. El enfrentamiento del cesarismo de los dos caudillos dio a los comicios un carácter plebiscitario sobre sus personas. “O César, o nada”. Puigdemont planteó su candidatura como una labor de restauración de su presidencia de la Generalitat y -para aumentar la presión sobre sus partidarios- afirmó que se retiraría de la política si no conseguía su restitución.
Los independentistas se tomaron muy a mal la estratagema de Sánchez de “españolizar” las elecciones catalanas. Los líderes de los partidos nacionales también se personaron en Cataluña, ya que las elecciones trascendían la región y afectaban al futuro de España. Tal fue el caso de Alberto Núñez Feijóo y de Santiago Abascal, pese a que el candidato del PP era Alejandro Fernández y el de Vox Ignacio Garriga, aunque no el caso de Yolanda Díaz, que apenas se dejó ver en el teatro de operaciones.
Tanto Aragonés como Illa trataron de desideologizar la campaña y se centraron en temas de gestión y de mejora de los servicios públicos, mientras que Sánchez y Puigdemont hicieron lo contrario. Aquél trasladó a Cataluña sus problemas personales y políticos, potenció el pánico a la derecha y a la ultraderecha -para él la misma cosa- y polarizó la situación instando a los electores a optar entre la democracia y el fango. Se encontraba en una situación contradictoria, pues, de un lado, necesitaba que el PSC lograra una clara victoria para poder apropiársela y consolidar la posición del PSOE con vistas a las elecciones europeas y, de otro, tenía que cuidar al máximo no molestar a sus socios independentistas de los que dependía para mantenerse en Moncloa. De aquí que combinara un discurso bifronte basado en la gestión -más propio de Illa- y en sus arengas en las que desarrollaba su teoría del fango y de los bulos de la derecha.
Un agonizante Puigdemont fue resucitado por Sánchez gracias a la concesión de una amnistía “ad personam”y al pacto para negociar el futuro de Cataluña y de España bajo la vigilancia de un obscuro diplomático salvadoreño. Según Rafa Latorre, Puigdemont era un paria en Bruselas, un fantoche en una corte de plástico, pero le bastaron 7 escaños en el Congreso para que su pasado quedara limpio y su futuro prometedor, y -como ha señalado Javier Redondo- al prófugo le salió la carambola de topar con un presidente de Gobierno dispuesto a extender a todo el territorio nacional las dinámicas del procès con el fin de renovar su mandato y elevar un muro que evitara la alternancia en el poder. Ello ha permitido a Puigdemont recuperar el protagonismo perdido y mantener que había que culminar la independencia y retomar el camino donde lo dejó el 1-O. Para Raúl del Pozo, los dos se necesitan porque no son nadie el uno sin el otro. Ambos hicieron llamamientos a sus simpatizantes para que acudieran en masa a las urnas. Para Sánchez, “cuanto más amplia sea la victoria de Illa, más estabilidad y mayor fuerza tendrá para avanzar” y, para Puigdemont, “mejor ir a votar con duda que dudar de qué Cataluña tendremos con Illa”. La Generalitat no podía ser “dócil ni entregada a las prioridades de aquellos que tienen intereses fuera de Cataluña”.
Presionado por su rival, Aragonés tuvo que abandonar su actitud pragmática y radicalizar su posición, exigiendo la celebración de un referéndum de libre determinación, la concesión a Cataluña de un régimen de soberanía fiscal y el blindaje de la inmersión lingüística. El PP también realizó una campaña dual, que oscilaba entre la firme oposición al nacionalismo de su candidato Fernández y el posibilismo ambiguo de Feijóo, que aún cree en la posibilidad de recuperar la colaboración con el catalanismo “moderado”. Su actitud se fue decantando hacia una postura más beligerante ante el temor de no lograr superar a Vox, y el propio Feijóo denunció los peligros de la inmigración ilegal , de la ”okupación” y de la inseguridad ciudadana. El tema de la inmigración -planteado principalmente por la candidata de Alianza Catalana, Silvia Orriols, fue uno de los más debatidos durante la campaña.
Otra maniobra de transformismo electoral fue el acercamiento de Illa a la “sociovergencia”, identificándose como “uno de los nuestros” con personalidades como Tarradellas y Pujol -al que calificó de padre la primera gran transformación de Cataluña-, fotografiándose con Miquel Roca, prometiendo que nombraría director general de los Mossos a Josep Lluis Trapero, y acogiendo en el PSC a exconsejeros de Puigdemont o de Torra, como Santi Vila o Miquel Samper. Siguiendo un modelo “atrápalatodo”, Illa trataba de atraer a los neo-convergentes supuestamente moderados, a los desencantados del nacionalismo y a los constitucionalistas. Sin embargo, un grupo de intelectuales constitucionalistas -Freixes, Savater, Boadella, Carreras- y antiguos dirigentes socialistas -Redondo, Leguina, Molina, Pagazaurtundúa- publicaron un manifiesto “Por un voto constitucional sin engaños”, en el que descalificaban al PSC por apartarse de la senda constitucional y pactar con partidos secesionistas que querían acabar con el régimen de 1978, y hacía un llamamiento al electorado para que no se dejara engañar por los cantos de sirena de quienes -bajo la promesa de pasar página y sanar las heridas- apoyaban a los que intentaban acabar con nuestras libertades y volver al régimen del 1-O o a la declaración unilateral de independencia. Illa no podía venderse como un candidato constitucional que pretendía superar el independentismo.
Reacciones a los resultados de las elecciones
Los diarios y las emisoras han reflejado en sus titulares y editoriales su interpretación de los resultados de los comicios, según la orientación de los rotativos. "ABC”:”Illa vence, pero necesita aliados”. Cataluña castiga al independentismo. El PSC gana, pero necesitará a ERC. Puigdemont presume pese a cosechar JxC los peores resultados en más de 40 años. “ “El País”: “Cambio de ciclo en Cataluña”. El triunfo de Illa entierra el procés. PSC gana y sumaría con ERC y En Común. El soberanismo pierde la mayoría después de cuatro décadas. “El Mundo”: “Retroceso histórico del independentismo en Cataluña”. Illa logra una gran victoria, pero Puigdemont exige a Sánchez gobernar. PSC gana por primera vez las elecciones e intentará formar un tripartito con ERC y Sumar. Puigdemont no se rinde, pide unidad al separatismo y recuerda al PSOE que gobierna España gracias a él. “La Razón”: “Cataluña finiquita la vía independentista”. ¡Gacias Cataluña!. Derrota del independentismo. Illa consigue una clara victoria que acaba con las aspiraciones de Puigdemont. ERC se derrumba, aunque tendrá la llave para la investidura de Illa. “La Vanguardia”: “Un cambio significativo”. Illa gana con claridad, pero debe pactar con el independentismo. ERC se desmarca de un tripartito y dice que irá a la oposición. Pueigdemont pide a ERC que le apoye para explorar una alternativa. El bloque independentista se queda en 43.2% y solo 61 diputados. “El Periódico”: Victoria clara de Illa. PSC impide la mayoría independentista, pero queda a expensas de ERC o Junts. Puigdemont supera a Aragonés e insiste en volver al Gobierno. ERC anuncia su paso a la oposición. En Común retrocede y la CUP se hunde. “Ara”: Cambio de ciclo. Illa se impone y el independentismo se desfonda. El PSC gana claramente por primera vez. El avance de Junts no compensa las caídas de ERC y la CUP. El tripartito suma por la mínima, pero Aragonés lo descarta, “El Punt Avui”: El independentismo recula fruto de la fuerte baja de ERC y del votante desencantado que se ha acogido a la abstención. Puigdemont recupera el liderazgo independentista y pide a los republicanos que rehagan los puentes.
Carlos Herrera ha puesto de manifiesto en la COPE el hartazgo de los votantes catalanes. Ha ganado Illa de forma incontestable en el manicomio catalán, aunque eso no suponga que vaya a gobernar. Cataluña ha dado la espalda al independentismo, que ha sufrido su peor registro de este siglo, al haber perdido 13 escaños. No se sabe qué Gobierno se va a formar, aunque un tripartito de izquierdas sería lo más lógico. También se podría formar un tripartito constitucionalista con PSC, PP y Vox , pero resulta inconcebible. No se firmará ningún pacto para gobernar hasta que se celebren las elecciones europeas. Según Carlos Alsina en Onda Cero, Cataluña ha dejado de ser independentista, al obtener mayoría los partidos que no defienden el independentismo. Illa ha ganado y confirmado que se abre una nueva etapa en Cataluña, pero ya ganó en la últimas elecciones y no pudo gobernar. Se han vuelto las tornas y de los 71 diputados independentistas y 64 constitucionalistas en 2021, se ha pasado a 71 diputados constitucionalistas y 64 independentistas, por lo que se ha cerrado la posibilidad de aventuras secesionistas. Hay que reconocer a Sánchez el éxito de que el independentismo haya dejado de ser mayoritario. El que más ha perdido ha sido el independentismo colaborador de ERC, que tiene, sin embargo la llave de la gobernabilidad. El PSC debe liderar esta nueva etapa, ya que Illa es el único candidato viable y -de no ser eso posible- habría que celebrar nuevas elecciones. Puigdemont pretende recuperar la presidencia de la Generalitat gracias al apoyo de las demás fuerzas independentistas y la abstención del PSC, y amenaza con hacer caer el Gobierno de Sánchez en caso contrario. Alsina se ha preguntado si éste obligaría a Illa a ceder el cetro al prófugo y ha concluido que no es probable, aunque sí posible, porque cabe esperar cualquier cosa del presidente con tal de mantenerse en el poder.
Mi opinión sobre el resultado de los comicios es la siguiente: 1) La buena noticia es que, por primera vez desde 1984, los independentistas no han conseguido mayoría de escaños en el Parlament. La mala es que uno de los partidos de la mayoría -el PSC- es solo constitucionalista a ratos y, por lo general, se alinea con los nacionalistas, ya que acepta el derecho a decidir, la celebración de un referéndum en Cataluña, los indultos y la amnistía, la concesión de un régimen fiscal especial , la condonación de la deuda, la política lingüística discriminatoria contra el castellano, y las negociaciones espurias en el extranjero. 2) El ganador incontestable ha sido el PSC, aunque sigue dependiendo del independentismo para gobernar y está sometido a su chantaje. Podría haber obtenido mejores resultados de no haberse producido la intervención populista de Sánchez, pues antes de su desembarco en la campaña -Illa se opuso a la presencia de ministros en la Comunidad, pero no podía vetar al “capo”-, el candidato llevaba una considerable ventaja. 3) Otro de los vencedores ha sido el blanqueado Puigdemont –“Moltes gracias”, Pedro-, que ha ganado 3 escaños y se ha impuesto a su hermano separado. El fugado presentará su candidatura a la presidencia de la Generalitat amparándose en el argumento “pedrista” de “somos más”. La diferencia de escaños entre el PSC y Junts es similar a la existente en el Congreso entre el PP el PSOE y, sí en Madrid gobierna el partido que quedó en segundo lugar en las elecciones, ¿por qué no puede hacerlo en Barcelona el que está en una situación similar? Para ello sería preciso que Illa no presentara su candidatura y que el PSC se abstuviera. Puigdemont ha lanzado veladas amenazas de que, de no ser tal el caso, peligraría la estabilidad del Gobierno de Sánchez. 4) La gran derrotada ha sido la ERC -representante del independentismo pragmático y colaborador-, que ha perdido 180.000 votos y 13 escaños. Aragonés ha asumido la responsabilidad del fracaso, renunciado a recoger su acta de diputado y afirmado que se retira de la primera línea de la vida política. Ha dicho que los republicanos pasarán a la oposición y no apoyarán ni un Gobierno de Illa, ni otro que requiera acuerdo entre PSC y Junts. 5) Entre los ganadores figura el PP que ha subido 12 escaños y quintuplicado los que tenía, sin que Vox se haya visto afectado, ya que ha conservado sus 11 diputados e incluso ganado 30.433 votos. Estos resultados son meritorios porque -debido a la vigente Ley electoral que beneficia a las provincias menos pobladas en las que prevalecen los independentistas-, mientras que para conseguir un escaño Junts ha precisado 19.222 votos, PSC 20.663 y ERC 21.253, Vox ha necesitado 22.462 y el PP 22.718. Fernández ha declarado que Cataluña ha finiquitado el perocès en las urnas, pero mucho me temo que peque de optimismo, pues -aunque la situación haya mejorado- aún queda proceso para rato. Según Latorre, no se ha producido el fin del procès, sino una desmovilización del electorado independentista. Como ha comentado Feijoo, sigue vivo porque Sánchez lo necesita para subsistir en la Moncloa 6) Entre los perdedores hay que situar a la CUP, que ha perdido 5 de sus 9 escaños, y a En Común-Sumar, que ha perdido dos, sin que en este caso pueda echarle la culpa a Podemos. El partido menguante de Yolanda Díaz sigue disolviéndose como un azucarillo. La CUP pasa a ser una fuerza irrelevante, como también lo es la xenófoba Alianza Catalana, pese a a que haya conseguido dos escaños. 7) Otra ganadora ha sido la abstención, que ha ascendido al 42%, la tercera más alta en la historia democrática de Cataluña. Muchos independentistas están hasta la barretina de los falsos profetas que les han venido anunciando en vano el inminente acceso a la tierra prometida de la independencia.
Perspectivas de Gobierno autonómico en Cataluña
Aunque el PSC haya ganado las elecciones, no hay ninguna garantía de que Illa presida el futuro Gobierno de la Generalitat, porque -como ha señalado Francisco Rosell- la situación se ha complicado ya que -a diferencia de lo ocurrido en el País Vasco- los dos socios separatistas de Sánchez han quedado descontentos. Procede ahora formar la Mesa del Parlament y elegir a su presidente, que goza de amplios poderes, entre los que figura el de designar a quién pueda ser su candidato a la presidencia de la Generalitat. Dado que el constitucionalismo tiene mayoría en la Cámara, el PSC debería impedir que la presidiera un independentista. Illa ha sufrido en sus carnes las arbitrariedades de una presidenta sectaria -como Laura Borrás- que impidió que pudiera presentar su candidatura pese a haber ganado las elecciones en 2021. Illa ha declarado que ningún catalán quedaría fuera y que iniciaría contactos para la constitución de la Mesa con todos los grupos parlamentarios, salvo Vox y Alianza Catalana -primera injustificada exclusión-. Negociaría con el PP la formación de la Mesa y la del Gobierno, aunque después de haberlo hecho con ERC y Junts, porque aún hay clases. La fecha tope para la constitución del Parlament es el 10 de junio, un día después de las elecciones europeas, y no cabe esperar que se logre ningún tipo de acuerdo para formar Gobierno antes de esa fecha. Al ganador de los comicios le faltan 26 votos para lograr la mayoría absoluta, por lo que será necesaria que se forme un Gobierno de coalición ¿Qué combinaciones son posibles para lograrlo?
1.-Tripartito de izquierdas: La fórmula más lógica y viable es un tripartito transversal formado por PSC, En Común-Sumar y ERC, que lograría justo los 168 votos necesarios para la investidura de Illa. Resulta, sin embargo, poco probable que -tras el batacazo electoral sufrido, especialmente por colaborar con el Gobierno central- ERC esté por la labor. Antes de abandonar la primera línea de la política catalana, Aragonés ha dicho que su partido pasaría a la oposición, y no apoyaría un Gobierno presidido por Illa, ni operaciones que requirieran el acuerdo de PSC y Junts. No lo tiene fácil porque, si apoya al PSC, se le sublevará parte de su electorado y, si no lo hace, se produciría un bloqueo que llevaría a la celebración de unas nuevas elecciones, en las que podría caer aún más bajo, y está en la ardiente duda. Siguiendo el modelo de Pedro, Monseñor Junqueras ha escrito una epístola a la ciudadanía en la que afirmaba que estaba dispuesto a seguir al frente del partido, pero los elementos más radicalizados del mismo le han pedido que dimita. El Consejo Ejecutivo ha decidido mantener la directiva actual, pero Junqueras y Rovira dejarían sus puestos en un Congreso a celebrar en noviembre, y ERC se abstendría en la investidura de Illa y pasaría acto seguido a la oposición. Esta fórmula de “dimisión en diferido” permitiría que se diera salida al bou y se formara un Gobierno del PSC en solitario, aunque con los fantasmas de En Común.
2.-Bipartito PSC-Junts: Illa no excluyó durante la campaña la posibilidad de gobernar con JxC para dar a luz a la “sociovergencia” que tanto gusta al empresariado catalán, que blanqueó a Puigdemont al visitarlo en Francia una delegación de la patronal, presidida por Sánchez Llibre. El fugitivo, sin embargo, dio un “fin de non recevoir” y les contestó que solo volvería a Cataluña como presidente de la Generalitat, puesto del que fue ilegalmente privado. El otro Sánchez -que se ha apoderado de la victoria de Illa y la va a capitalizar con vistas a las elecciones europeas- no parece inclinado a renunciar a las primogenitura de su escudero catalán, pese a las amenazas del exiliado.
3.-Coalición independentista: Puigdemont ha exigido al PSOE que le permita formar un Gobierno soberanista de orientación catalana con el apoyo de 59 o 61 diputados, para lo que sería necesario que el PSC se abstuviera y permitiera su elección en segunda votación. El prófugo ha aplicado a Sánchez su propia medicina y le ha recordado su pacto de truhanes: Tú gobiernas en Madrid y yo en Barcelona, y “pacta sunt servanda”. Pero tras su éxito “por proxys”, Sánchez parece incurrir en uno de sus habituales cambios de opinión y ha decidido que Illa presente su candidatura. Como ha dicho la portavoz del PSC, Nuria Parlón, su partido no investirá a Puigdemont, aunque amenace con bloquear la gobernabilidad de España ¿Cederá Sánchez al chantaje de su socio?
4.-Coalición constitucionalista: La suma de los diputados del PSC, PP y Vox alcanza la mayoría de 168 votos, pero que Sánchez acepte esta forma de Gobierno no es concebible en la España del Muro. Una variante sería recurrir a la “fórmula Collboni”, con el apoyo del PP y la abstención de Vox, que podrían continuar en la oposición. Para llegar a esta solución sería preciso que el PSC les ofreciera alguna compensación, como la de permitir su acceso a la Mesa del Parlament, e incluso dar su presidencia al PP.
5.-Nuevas elecciones autonómicas: Si no se llegara a un acuerdo antes del 25 de junio, habría que repetir las elecciones en octubre. Aunque todos los partidos se han mostrado contrarios a ello, la repetición de las elecciones, podría beneficiar a Puigdemont, quien le ha tirado los tejos a ERC y le ha instado a recuperar la unidad del independentismo bajo su liderazgo. Podría actualizar la fórmula de “Junts pel MÍ” para unificar todas las fuerzas separatistas y tratar de recuperar la perdida mayoría en votos y escaños.
6.-Adelanto de elecciones generales: Sánchez tendría que convocar nuevas elecciones generales en el caso poco probable de éxito de una moción de censura apoyada por el PP, Vox y JxC, o por su libre decisión. Sánchez es capaz de sacar conejos de su chistera cuando ve en peligro su permanencia en Moncloa. Si Puigdemont le retirara su apoyo, podría dirigirse a la ciudadanía en un dramático alegato en el que mantuviera que -pese a haber derrotado al independentismo, restaurado la concordia en Cataluña y ganado las elecciones autonómicas- las fuerzas de la oposición no le permitían gobernar, en la esperanza de que el electorado empatizara con sus cuitas y le apoyara.
Aunque no quepa excluir la celebración elecciones, lo más probable es que ERC acabe por permitir la formación de un Gobierno de Illa, lo que supondría un alto coste para la Nación, tanto política como económicamente. Sánchez reconocería la “realidad nacional” de Cataluña” a través una reforma del Estatuto en la línea acordada en 2005 -con la connivencia del Tribunal Constitucional de Conde Pumpido- y aceptaría la celebración en Cataluña de alguna forma maquillada de referéndum de libre determinación. Asimismo, tiraría de chequera y le concedería un régimen fiscal similar al vasco, le condonaría la deuda de €72.000 con el Estado y aumentaría la inversión.
Dada la obsesión Sánchez por el poder, no cabe excluir que, con tal de no perderlo, obligue a Illa cederle la poltrona a Puigdemont, al ser el líder del PSC más sumiso al PSOE. Si se lo ordenara Sánchez, el disciplinado Illa diría -como José Luis López Vázquez en la película “Atraco a las 3”- “Heme aquí, un admirador, un amigo, un esclavo”. Pese a haber sido un pésimo ministro de Sanidad, Illa –“presidente en maceración”, según “La Vanguardia”- es humanamente la antítesis de Sánchez, pero políticamente está completamente sometido a él. Sin la sombra de su jefe -rehén del independentismo y sumiso a su chantaje-, Illa podría ser un buen presidente de la Generalitat, a pesar de las hipotecas del PSC con el nacionalismo. Según “El Mundo”, sigue estando condicionado por dos partidos que son contrarios a la igualdad entre los españoles y no han abandonado su fiebre identitaria. Para restablecer la concordia en Cataluña, será imprescindible un acuerdo entre los dos principales partidos de España con el fin de devolver la presencia del Estado en la Comunidad e imponer la igualdad de derechos y deberes de todos los españoles, dondequiera que residan.
Madrid, 16 de mayo de 2024
miércoles, 8 de mayo de 2024
Epístola de Pedro a los Adefesios
EPÍSTOLA DE PEDRO A LOS ADEFESIOS
Pedro Sánchez (PS) posee la rara habilidad de sorprender a todo el mundo por su imprevisibilidad y la irracionalidad de su conducta. Es un personaje que se caracteriza por su ambición, ansias de poder, narcisismo, egoísmo, falta de empatía y menosprecio de los demás -incluido su propio partido-, que se manifiesta en sus golpes de efecto, giros de guion, mentiras y cambios de opinión. Le encanta “épater” a la gente, como ha hecho con su última ocurrencia, la carta a la ciudadanía española, que Santiago González ha calificado con ironía de “Epístola de Pedro a los Ad-efesios”. La misiva no va dirigida a los españoles, sino los militantes y simpatizantes socialistas, para instarles a que muestren su incondicional apoyo al amado líder y a su abnegada esposa.
La epístola tiene notables defectos de forma y de fondo. Si el presidente del Gobierno quería transmitir a sus ciudadanos un mensaje tan importante como es la posibilidad de renunciar a su mandato, lo natural sería que lo hiciera en las Cortes que lo eligieron, donde reside la soberanía nacional. Una solución alternativa habría ido hacerlo a través de la RTVE oficial de España, pero nunca a través de una entidad privada cómo “X”, que no está al alcance de todos los españoles. Siguiendo su autismo político, PS tomó, al parecer, su decisión de acuerdo solo con su consorte Begoña Gómez (BG), sin consultar a los miembros de su Gobierno y ni siquiera informarles.
Cuando leí la dolorida misiva del apenado presidente pensé que no merecía la pena comentarla por ser tan pueril y narcisista. Era increíble que una que persona inteligente expusiera a la ciudadanía semejantes simplezas de forma institucional. Según PS, que un magistrado admitiera a trámite una injusta acusación a su consorte fue la gota que colmó el vaso de su indignación, porque él estaba enamorado de su mujer. Habrá que creerlo, aunque no haya hecho nada para defender su honor, y se haya limitado a atacar a la derecha y a la ultraderecha -a las que citó en ocho ocasiones- y a culpar nominalmente a Feijóo y a Abascal, “colaboradores necesarios junto a una galaxia digital ultraderechista y la organización Manos Limpias”. Feijóo le había pedido explicaciones en el Congreso y -tras su negativa a responder- planteó el caso ante la Oficina de Conflictos de Intereses, no contra BG, sino contra PS, por no haberse abstenido cuando el Consejo de Ministros concedió un rescate de unos 800 millones de euros a una empresa que había financiado las actividades de Gómez. Si estaba convencido de que la acusación era falsa, debería haberlo dicho y, si la consideraba calumniosas, haber presentado una querella contra el diario digital que la publicó, pero no hizo ni una cosa ni la otra. Se limitó a presentar una queja porque el titular de la noticia -“La UTE Begoña Gómez”- era inexacto, pero no refutó ni un ápice de la información. Por otra parte, la acción popular está abierta a cualquier persona física o jurídica, sin que la Ley de Enjuiciamiento Criminal excluya a organizaciones de ningún tipo. PS ha seguido la doctrina de Cándido Conde-Pumpido, quien afirmó que el Tribunal Constitucional no aceptaría ningún recurso planteado por Vox. Lo decisivo no era tanto qué se denunciaba como quién lo hacía y, si era una persona no grata, no se tramitaba. Como el 70% de los españoles, nunca creí que el presidente fuera a dimitir.
PS echó en cara al PP y a Vox que hubieran instrumentalizado su mayoría en el Senado para establecer una Comisión de Investigación para “esclarecer los hechos relacionados con este asunto”, lo que no era cierto, porque su objetivo era investigar el fraude de las mascarillas o “caso Koldo”. Sánchez obvió decir que el PSOE había votado a favor de la creación de la Comisión y silenció que la “mayoría Frankenstein” del Congreso había instrumentalizado la creación de otra Comisión sobre el fraude de las mascarillas. Y para rematar, dio un bajonazo al afirmar que habían judicializado el asunto al presentar una demanda ante un juzgado de Madrid, que la admitió a trámite como era su obligación. Ni Feijóo ni Abascal son miembros de Manos Limpias y lo que ha hecho el juez ha sido abrir diligencias sin imputar a nadie. Si Sánchez, “a pesar de todo”, sigue creyendo en la justicia española, no tendría por qué preocuparse.
Ha declarado que intereses derechistas y ultraderechistas esparcían fango para tapar sus escándalos de corrupción y habían “traspasado la línea del respeto a la vida familiar de un presidente del Gobierno”. Esto lo ha afirmado un político que, en su discurso de investidura en el Congreso, acusó de corrupto al hermano de Isabel Díaz Ayuso, que había sido exonerado por las fiscalías española y europea, y que repitió en varias ocasiones su falsa afirmación. Acusó a Ayuso de corrupción por ser la pareja de un ciudadano particular que había defraudado a Hacienda antes de conocerla, y a la esposa de Feijoo porque la Xunta de Galicia había financiado a la empresa en la que trabajaba, lo que era falso…”Díjole la sartén al cazo, apártate que me tiznas”.
Volvió a afirmar por enésima vez que la derecha y la ultraderecha vertían fango sobre su amada esposa, lo que le había llevado a plantearse si merecía la pena continuar al frente del Gobierno, dado que él no tenía apego al cargo. Menos mal, porque si llegara a tenerlo, tendríamos a PS en la presidencia hasta el Día del Juicio. Dando muestra de irresponsabilidad, dijo la ciudadanía: “Ahí os quedáis, que yo no me voy cinco días de vacaciones pagadas para meditar en la paz de los jardines de la Moncloa sí merece la pena sacrificarme por Ustedes”. Jesucristo necesito 40 días de retiro en el desierto, pero al profeta del socialismo le ha bastado con cinco.
El caso de Begoña Gómez
El “caso BG” se ha hecho noticia a nivel mundial, hasta el punto de que Xavier Vidal-Folch lo ha comparado en "El País” con el “affaire Dreyfuss”. Ha habido esposas de presidentes de Gobierno que ejercieron una carrera profesional al margen de la actividad política de sus maridos. Carmen Romero -esposa de Felipe González- era profesora de instituto y fue diputada, y Ana Botella -esposa de José María Aznar- era técnica de administración civil y fue alcaldesa de Madrid. También Eva Cárdenas -pareja de Feijóo- era economista, trabajó en Inditex y preside su propia empresa. Tal no era el caso de BG, que ha desarrollado su carrera profesional al amparo de su marido. En 2018, el Instituto Empresa creó el African Center y la nombró directora y, en 2020, la Caixa y Reale Seguros crearon en la Universidad Complutense una cátedra sobre Transformación Social Competitiva, dela que BG fue nombrada codirectora, pese a no tener un doctorado y ni siquiera una licenciatura oficial homologada. Cabe preguntarse -como en la canción de Rudy la Scala- “¿por qué será? Para encontrar situaciones similares, hay que remontarse, fuera de Europa, a la Argentina de Perón -y sus esposas Evita e Isabel- y de Néstor/Cristina Kirchner, a la Filipinas de Ferdinand/Ymelda Marcos o a la Nicaragua de Daniel/Rosario Ortega y, dentro de Europa a los Ceaucescu.
Los diarios digitales “El Confidencial” y “The Objective” han publicado información que afectaba a BG, que -aunque haya soliviantado a la pareja presidencial- no ha sido desmentida. 1) En septiembre de 2018, la empresa pública Red.es adjudicó un contrato de €750.000 a la empresa Inmark Europa de la que BG era socia. 2) En enero de 2020, Globalia y el African Center firmaron un Acuerdo por el que aquél financiaría a éste con €40.000 anuales. BG celebró varias reuniones con el CEO de Globalia, Javier Hidalgo, y el conseguidor Victor de Aldama, para hablar de negocios. 3) El 3 de noviembre de 2020, el Gobierno concedió a Globalia un préstamo de 475 millones de euros para el rescate de “Air Europa”, y el 16 de marzo de 2021 otro de 320 millones, y Sánchez votó a favor de su concesión. 4) El 1 de julio de 2020, la UTE de Innova Next -empresa de Carlos Barrabé que financió la cátedra de la UCM- y Valley Digital Business School, consiguieron una subvenciones de 7.7 millones -pese a que otras tres compañías habían ofertado presupuestos inferiores-, y el 2 de julio de 2021 otra de 4.4 millones. BG firmó sendas cartas en las que apoyaba la petición de dichas subvenciones y se comprometió a colaborar en la ejecución de los contratos. 5) En 2022, el Ministerio de Transición Ecológica otorgó una ayuda de €96.397 a un proyecto contra la despoblación dirigido por BG. 6) Entre 2022 y 2023, BG centró sus actividades en la captación de fondos y en la estrategia para obtener fondos que concedía el Gobierno que presidía su marido..7) BG ha acompañado a su esposo en varios viajes oficiales a África y tuvo agenda propia. Son datos contrastados y no bulos.
Además de la querella formulada por Manos Limpias, la Asociación “Hazte Oír” ha presentado otra querella contra BG por la posible comisión de un delito de tráfico de influencias -artículos 429 y 430 del Código Penal-. La Asociación ha alegado que Gómez se prevaleció de su condición de esposa del presidente del Gobierno para establecer relaciones comerciales y profesionales con diversas empresas, y que habría podido ofrecerse para influir ante su esposo a fin de que se concedieran subvenciones y ayudas públicas a algunas de estas empresas.
Como comentó el director de “El Confidencial”, Nacho Cordero, aunque fuera normal que las empresas que concurrían a concursos públicos presentaran cartas de aval de personas o entidades, estéticamente no quedaba bien que la firmante de las mismas fuera la esposa del presidente del Gobierno que concedía dichas ayudas. Yo añado que también lo es éticamente, porque la mujer del César no solo debería de ser honrada, sino parecerlo. A juicio de Miriam González de Clegg, el caso de BG demostraba que disponer de normas éticas sobre la conducta de las esposas de los políticos no solo era bueno para la sociedad, sino que también protegía a ellos y a sus familias, y ha comentado con sorna que, si ella hubiera hecho lo que Gómez cuando su marido era viceprimer ministro, habría sido quemada en Trafalgar Square. PS ha culpado a las derechas de presionar a su mujer, pero debería culparse a sí mismo porque, de haber establecido un sistema con reglas claras sobre la cuestión, BG no habría tratado con las empresas que la financiaban. Sánchez no ha mostrado el menor interés en resolver el problema e incluso se ha negado a facilitar a la Oficina de Conflicto de Intereses del Grupo de Estados contra la Corrupción la información sobre los ingresos de su cónyuge que éste le había sido solicitado, so pretexto de la protección de datos personales, y pese a que el Grupo le había instado a que acabara con el oscurantismo, al ser su esposa titular de una empresa de captación de fondos públicos. Según Carlos Segovia, BG aceptó el patrocinio de Globalia a sus proyectos, lo que suponía como mínimo una gran imprudencia, aunque no hubiera quedado acreditado que mediara en la concesión de la ayuda estatal a la empresa. Esto lo tendrá que decidir el juez cuando realice las correspondientes diligencias, pero, en cualquier caso, no huele demasiado bien.
La situación de BG resulta aún más llamativa si se compara con la de Ayuso. PS se ha rasgado las vestiduras por el inadmisible acoso a su esposa, pero ha seguido con aquélla una táctica mucho peor de la que se queja que se ha aplicado a su consorte. BG se dedicaba a la captación de fondos que concede el Gobierno de su marido y empresas que la financiaban han recibido subvenciones del mismo. La pareja de Isabel, Alberto González -que realizó un supuesto fraude a la Hacienda cuando todavía no era pareja de la presidenta- no ha recibido subvención alguna de la Comunidad de Madrid, y resulta delirante que se culpe a Ayuso de los delitos que haya podido cometer un particular con el que no tenía relación alguna cuando los cometió. PS, sus ministros y los diputados de la Asamblea de Madrid la han acusado de corrupta e incluso de asesina, y pedido reiteradamente su dimisión. Item más, la Fiscalía de la Audiencia Provincial -por orden de la Fiscalía General del Estado- hizo públicos datos confidenciales de las negociaciones entre el abogado de González y la Fiscalía, en violación de la Ley General Tributaria, y el fiscal general del Estado, Álvaro García, ha ordenado a dicha Fiscalía que se oponga la tramitación de la querella que González ha presentado por la flagrante violación de sus derechos. Los Tribunales deberán decidir tanto sobre si BG ha incurrido en ilícito penal, como si se han violado los derechos de González.
“No te vayas todavía, no te vayas por favor”
En su libro “Pedro Sánchez y el síndrome de Narciso: De la socialdemocracia al socialismo autócrata”, Luis Aramburu ha mantenido que PS cumple con 9 de los 10 parámetros definitorios del narcisismo. Amará mucho a su mujer y a su familia, pero, por encima de todo, se ama a sí mismo. Para Arcadi Espada, en el PSOE, el presidente es respetado, admirado y temido, pero no inspira sentimientos de amor del bueno. Él lo necesita y, con prepotencia, lo exige. Ésta es una de las razones por las que -según Rafa Latorre- se ha regalado a cuenta de todos los españoles cinco días de narcisismo para que le pidan que prolongue durante algún tiempo más su frentismo. “Nada resulta tan patético como el gesto del Narciso que dice que está pensando en irse para que le rueguen que se quede”. Los dirigentes socialistas han acudido en tromba a Ferraz para mostrarle quién lo adoraba más, aunque no tanto la parroquia, que apenas ha atendido al llamamiento del partido, pese al flete de más de100 autobuses, los bocadillos de rigor y la excursión gratis a Madrid. Puede que fuera porque no han querido imitar las romerías de los sindicatos verticales de la tan denostada época del franquismo, aunque sus dirigentes -Pepe Álvarez y Unai Sordo- han participado en una manifestación cultural junto a los supervivientes de la Cofradía de la Ceja. La presencia de menos de 12.000 entusiastas en la sede socialista y otros 5.000 más frente a las Cortes no parece que haya supuesto una clamorosa muestra de aprecio por el Ausente.
Los que sí han estado al nivel que de ellos esperaba han sido los miembros del Comité Federal, liderados por la vicepresidenta Montero, que -golpeándose enfebrecida el pecho como una orangutana- exclamaba: “Unos señalan con mentiras y burlas, otros las difunden y, al final de esta cadena, los últimos, los más cobardes de todos, los que tiran la piedra y esconden la mano -como hace el señor Feijoo- intentan sacar tajada de la infamia para conseguir con otros medios lo que no pudieron conseguir en las urnas. No hay derecho a aceptar que, en la responsabilidad política que ocupamos, vaya implícita la penitencia de ver sufrir a quienes más quieres por lo que tú haces […] Begoña, compañera, estamos todas contigo”. Sin venir mucho a cuento, Óscar Puente recordó a su abuelo, quien en 1939 estuvo a punto de ser fusilado por “rojo”, María Chivite a los que recurrían a los insultos y al acoso, y Eneko Andueza a “los socialistas asesinados en las cunetas y en las tapias de los cementerios”, y a los que, como él, tenían que “mirar a diario los bajos de sus coches y despedirse de los suyos por si no volvían”. No se acordó de los muertos del PP y de las fuerzas de seguridad que -de haber conservado la vida- no habrían acudido a homenajear a quien había pactado con sus asesinos y los había hecho socios de su Gobierno. La prédica más original fue la de la vicepresidenta Teresa Rivera, que no plujo a todos los manifestantes: ”Nos pueden llamar perros, porque somos fieles y leales”. Se produjo tal exaltación del culto a la personalidad de PS que ni en Pyonyiang (República Popular de Corea).
Al son de la canción de Rigoberta Bandini “Me gustaría ser el perro de mi perro”, socialistas de todo cuño confraternizaron y bailaron en la calle en una apoteosis final. Faltó por cantar las sevillanas “No te vayas todavía, no te vayas por favor, porque el escaño mío llora cuando dice adiós”, quizás porque María Jesús temiera a que le pudieran recordar la música de los ERE andaluces. He echado de menos la presencia de Pedro de la Mancha, que confesó que había llorado como un niño cuando leyó la lacrimógena misiva de su tocayo. En vez de escribir cualquier bobada sentimentaloide, debería filmar una versión actualizada de “Mujeres al borde de un ataque de nervios”, con la Montero de protagonista y como actriz secundaria la ministra de Igualdad, Ana Redondo, famosa por sus alaridos de“!Verguenza!” en el Congreso. A pesar del escaso entusiasmo mostrado a favor de la permanencia del amado líder, éste -que con bien poco se ha conformado- se ha sentido tocado en su corazón y, sacrificándose por la nación, ha dicho como el cómico argentino Joe Rigoli: “Yo sigo”.
Resultado de la reflexión presidencial
A las 11 de la mañana del día 29, PS hizo pública su esperada declaración institucional, en las que reveló las conclusiones a las que había llegado tras sus ejercicios espirituales: “He decidido seguir, con más fuerza si cabe, al frente de la presidencia del Gobierno de España. Esta decisión no supone un punto y seguido, sino un punto y aparte”. Carlos Alsina se ha preguntado si se trata de un punto y aparte o de un punto en boca, porque Sánchez se ha comprometido a regenerar la democracia y, cuando un autócrata promete hacer semejante cosa, los demócratas deben echarse a temblar, Si PS quiere dar un golpe de timón en la gobernación de nuestro país, lo correcto sería que consultara a los españoles en unas elecciones, pero no lo hará porque las urnas las carga el diablo y “de los escarmentados nacen los avisados”.
PS -que tanto ha embarrado el país- ha afirmado que hay que impedir que el fango colonice impunemente la vida pública y luchar contra los movimientos reaccionarios que aspiran a imponer su agenda regresiva, mediante la desinformación, la falsedad, el odio y las amenazas, a través de un rechazo colectivo, sereno y democrático, más allá de las siglas y las ideologías, que él se compromete a liderar con firmeza. Sus palabras no pueden sonar más falsas porque no admite más ideología que la suya y ha levantado un muro frente a los que no están de acuerdo con él, a los que sitúa en la ”fachosfera” y a los que niega la posibilidad de gobernar, porque solo reconoce su propia legitimidad. Sus opositores no son adversarios políticos, sino enemigos existenciales a los que hay que eliminar. Se ha apropiado de la democracia, a la que identifica consigo mismo conforme a los dogmas populistas, ha vaciado de contenido al poder legislativo, y pretende dominar los dos únicos poderes que escapan a su completo control: el judicial y el mediático. El Gobierno se aprovecha de los medios de comunicación que controla, como RTVE. Así, su superestrella Silvia Intxaurrondo atacó a sus colegas en “La Hora de la 1”, afirmando que los periodistas estaban perdiendo la vergüenza y no se podía tragar el sapo del seudo periodismo de las falsedades y de los bulos. Después dio paso a la periodista podemita Laura Arroyo, quien instó a PS a que “tocara” al Poder Judicial e interviniera directamente los medios de comunicación que no eran tales y a los periodistas corruptos, para que dejaran de ejercer de cloacas mediáticas, porque sin ellos no existiría el “lawfare”. Ya pueden irse preparando los jueces y los periodistas no adictos al régimen para lo que se le va a venir encima con la “regeneración democrática” de Sánchez, que no será regeneración, ni será democrática.
¿Es España una democracia plena?
PS ha afirmado en numerosas ocasiones que España era una democracia plena y un ejemplo de calidad democrática, aunque ahora lo ponga en duda, porque aprecia una mayúscula conjura derechista en la que jueces, partidos, medios de comunicación y asociaciones mafiosas se han concertado para no dejarlo gobernar. Por culpa de estas maniobras, el PSOE solo ha podido gobernar durante 27 años, mientras que el anti demócrata PP, lo ha hecho durante 15. España sigue siendo una democracia plena, pero el problema radica en que su presidente no es demócrata. Baste mencionar su oposición a dos de sus principios básicos: la alternancia en el poder y la independencia judicial.
Desde el pacto del Tinell a los acuerdos con los partidos separatistas, el PSOE ha intentado impedir que el PP acceda al poder, negando el imperativo democrático de la alternancia de partidos en el Gobierno. PS ha alzado un muro y lanzado a las tinieblas exteriores a la mitad de la población española, porque la democracia solo está encarnada en él. No admite los contrapoderes, ni la crítica de la oposición, y las sesiones de control parlamentario son un lamentable espectáculo, en el que el presidente y sus ministros violan sin cesar el artículo 111 de la Constitución, que establece que el Gobierno y sus miembros están sometidos a las interpelaciones y preguntas que se le formulen en las Cámaras. No contestan a ninguna de ellas y se dedican a insultar a la oposición, ante el dontancredismo de la sectaria presidenta del Congreso Francina Armengol. El culmen del menosprecio de PS por la democracia ha sido la compra de los siete votos de JxC para mantenerse en el Gobierno, mediante el pago en especie de la concesión de una ilegal amnistía a los sediciosos catalanes.
PS Ha hecho cuanto estaba en su mano para tratar de controlar al Poder Judicial: conversión de la Abogacía del Estado y de la Fiscalía General en órganos del Gobierno, control del Tribunal Constitucional mediante la designación como jueces de antiguos ministros y altos cargos de su Gobierno, e intento de colonizar el Consejo General del Poder Judicial para poder controlar el Tribunal Supremo -última aldea rebelde en el territorio comanche de Sánchez-, mediante la privación de la potestad del Consejo de hacer nombramientos de magistrados y su negativa a cumplir la recomendación de la UE de que los miembros de procedencia judicial sean elegidos por los jueces. Como ha dicho en su apoyo el secretario general CC.OO, el jurista Sordo, es una bobada que los jueces elijan a los jueces. Quien sí es jurista -pese a que no se note-, Yolanda Díaz, ha afirmado que el artículo 122 de la Constitución obliga a renovar el CGPJ al PP, pero también al PSOE, aunque esta tarea no corresponda al Gobierno sino a las Cortes, que ni lo han intentado. PS ya trató substituir el quorum de 3/5 por el de mayoría simple para el nombramiento de sus miembros y ahora parece que va a volver a las andadas. Está por cubrir 1/3 de los magistrados del TS y, si se tiene en cuenta el precedente de la cúpula de la carrera fiscal -en la que la inmensa mayoría de los tenientes fiscales designados por Dolores Delgado y Álvaro García son miembros de la minoritaria Unión Progresista de Fiscales-, cabe prever lo que ocurrirá si el PSOE consigue controlar el CGPJ: Hasta los bedeles de la Asociación de Juezas y Jueces para la Democracia podrán acceder al TS a pesar de su carácter minoritario, porque se habría agotado el número de jueces miembros disponibles.
La situación actual fue magistralmente descrita en un editorial de “El País” titulado “El gran crispador”:“Todo gobernante, cuando se siente en apuros, acostumbra a presentarse como una víctima de alguna conspiración y a presentar a la oposición como el agente de la subversión. El guion es conocido. El presidente lo ha hecho suyo y, a este paso, dejará a España con una fractura política y social sin precedentes en la historia de la democracia”. El problema es que este clarividente dictamen fue redactado en 2003 y su destinatario no era PS, sino Aznar, y no creo que el portavoz oficioso del Gobierno esté dispuesto a reproducirlo “hic ac nunc”.
La insólita “performance” de PS es una mezcla de esperpento y de telenovela venezolana. La inmensa mayoría la ha calificado de docudrama y de monumental farsa. “The Economist” ha llamado “Drama King” a Sánchez, que ha sido objeto del ludibrio internacional, y -como ya advirtió Josep Tarradellas- a un político le resulta difícil volver del ridículo. Incluso una periodista tan experimentada como Lucía Méndez -que creyó ingenuamente en la sinceridad de Sánchez- ha concluido defraudada que el presidente no se ha comportado con el rigor y la responsabilidad que exigía su alta magistratura, y se ha mostrado capaz de todo -incluso de utilizar a su familia- para fortalecer su posición política. Ha tenido en vilo al país y al mundo entero para que sus deudos salieran a la calle en procesión para pedirle entre lágrimas que no se fuera, y su actuación ha sido inexplicable. Cayetana Álvarez de Toledo ha comentado que PS se ha erigido en portavoz y líder del “lawfare”, y pretende criminalizar a jueces y a periodistas. Ha realizado una treta guerracivilista y, con su incitación al cainismo y al frentismo, fomenta la polarización y el enfrentamiento entre las dos Españas.
Sánchez ha quedado hecho polvo tras el fracaso de su lacrimosa misiva, pero al menos puede decir con Francisco de Quevedo que es “polvo enamorado”. Al quinto día resucitó y -como ha comentado irónicamente Alsina- el resucitado San Pedro mártir regresó del jardín de los olivos para imponer su reino. Se apareció en Barcelona a sus desconsolados discípulos, que le han preguntado angustiados “ ¿eres tú ,Señor? ¿qué será de nosotros cuando tu no estés?”. Reconfortados con la aparición, han proclamado -por boca de María Magdalena Montero- que estaban prestos a morir para defender la democracia. Lo mismo afirmaron los líderes de los sindicatos durante la manifestación del 1 de mayo, que, más que una concentración sindical, ha sido una manifestación ministerial, en la que han empuñado la pancarta dos vicepresidentas y nueve ministros, al frente de una famélica legión de menos de 10.000 personas. Si la regeneración de la democracia solo se basa en esta escuálida concentración de parias de la tierra, le veo poco futuro a la gran misión que PS se ha impuesto. Sánchez podría haber hecho como el primer ministro de Escocia, Humza Yousaff , quien –tras meditar tan solo durante un fin de semana- llegó a la conclusión de que era mejor pasar el timón a otro y no comprometer sus valores y principios, pero, Sánchez -que carece de principios- es Pedro y, sobre su piedra personal ha levantado su Iglesia. Ha cruzado irresponsablemente todas las líneas rojas posibles en el campo de la política y de la ética y, con semejante bagaje, resulta imposible que pueda regenerar a España y, menos aún, regenerarse él.
Madrid, 3 de mayo de 2024
Pese a la consigna de moda de "zorrear", no debemos hacerlo
PESE A LA CONSIGNA DE MODA DE “ZORREAR”, NO DEBEMOS HACERLO
Del 7 al 11 de mayo se está celebrando en Malmoe el 68° Festival de la Canción de Eurovisión, en el que España está representado por la cantante Mary Bas, con la canción “Zorra”, de la que es autora.
Resultados de España en el Festival de la Canción de Eurovisión
España es una de los “cinco grandes” de Eurovisión, que tiene asegurado el pase directo a la fase final del concurso anual de canciones. El Festival fue creado en 1956 y España participó por primera vez en 1961, con gran éxito al principio, pues ganó el concurso dos años consecutivos -1968 y 1969-, con las cantantes Massiel y Salomé. Desde entonces no ha vuelto a ganar y se ha tenido que conformar con quedar en segundo lugar en cuatro ocasiones -1971, 1973, 1979 y 1995-, y en tercer lugar en otras dos -1986 y 2022-. Especial relevancia tuvo la espléndida canción del Grupo Mocedades “Eres tú”, una de las mejores que han pasado por el Festival.
Durante mi período como embajador en Irlanda, tuve ocasión de asistir en persona al concurso de 1988 celebrado en Dublín, en el que representó a España el Grupo “La Década Prodigiosa”, que tuvo -a mi juicio- una meritoria actuación, aunque solo terminará clasificado en 11° lugar. Claro que sobre gustos no hay nada escrito.
En los últimos 30 años, España ha tenido una actuación en el Festival manifiestamente mejorable y ocupado las últimas posiciones en la clasificación, salvo en 2022, en el que Chanel consiguió un honroso tercer puesto. Especialmente desastrosa fue la actuación en 2008 de Chiquilicuatre, que fue una auténtica caricatura, un menosprecio al Festival y una tomadura de pelo a sus auditores, lo que supuso un desprestigio para España. Algo similar puede pasar con la canción de hogaño, “Zorra”, con la diferencia de que la no-actuación de Chiquilicuatre -con su guitarra de juguete- fue ridícula pero inofensiva, mientras que la de Bas y sus fornidos bailarines es, además de ridícula, ofensiva. Hace años que dejé de seguir el festival por TV a causa de su continua degradación y el espectáculo dejó de ser de mi gusto.
Selección de la canción que participa en el Festival
El pasado mes defebrero, el dúo “Nebulossa”, formado por la cantante “pop” María Bas -de 55 años- y su esposo, el productor Marc Dasousa, ganó de forma inesperada el “Benidorm Fest”, en el que se seleccionaba la canción y el artista que deberían representar a España en el Festival de Malmoe. La letra de la canción ganadora es francamente provocadora al ensalzar la figura de la “zorra”, palabra peyorativa que, en una de sus acepciones, se equipara a la de “prostituta”. La canción no tiene desperdicio y, para que puedan comprobarlo, la reproduzco en su integridad:
“Zorra, zorra, zorra
Zorra, zorra, zorra
Ya sé que soy solo una zorra,
que mi pasado te devora.
Ya sé yo que soy la oveja negra,
la incomprendida, de piedra.
Ya sé que no soy quien tú quieres (lo sé)
entiendo que te desesperes (lo sé),
pero esta es mi naturaleza.
Cambiar por ti me da pereza.
Estribillo: Estoy en un buen momento.
Solo es cuestión de tiempo.
Voy a salir a la calle a gritar lo que siento
a los cuatro vientos.
Si salgo sola, soy la zorra.
Si me divierto, la más zorra.
Si alargo y se me hace de día,
soy más zorra todavía.
Cuando consigo lo que quiero (zorra, zorra),
jamás es porque lo merezco (zorra, zorra)
y aunque me estoy comiendo el mundo
no sé valorar ni un segundo.
Estribillo
Estoy en un buen momento (zorra, zorra),
reconstruida por dentro (zorra, zorra)
esa zorra que tanto temías se fue empoderando
y ahora es una zorra de postal (zorra, zorra, zorra),
a la que ya no le va mal,
a la que todo le da igual.
Lapídame, si ya total
soy una zorra de postal.
Yo soy una mujer real (zorra, zorra ,zorra)
y si me pongo visceral (zorra, zorra, zorra),
de zorra pasaría chacal, metido en un zarzal,
soy una zorra de postal (zorra ,zorra, zorra).
Estribillo
Estoy en un buen momento (zorra, zorra, zorra)
reconstruida por dentro (zorra, zorra, zorra).
Esa zorra que tanto temías se fue empoderando
y ahora es una zorra de postal”.
Su valor literario está bajo mínimos y no puede haber en el texto más zorras por metro cuadrado, pues hasta 45 veces se pronuncia la palabra mágica y, cuando Bas cantaba el verso “si alargo y se me hace de día”, el público enardecido coreaba: “soy más zorra todavía”. La nueva diva, ensalzada hasta el punto de ser calificada como “nuestra Madonna”, ha afirmado que se trata del “himno a la emancipación de la mujer, que hace lo que quiere sin dar explicaciones a nadie”. Para algunos comentaristas, hay acordes de” Zorra" que fusilan canciones de Rigoberta Bandini -concretamente “ In Spain We Call It Soledad”-y, como su mismo nombre indica, ya las ”Vulpes” en los años 80 querían ser unas zorras, y lo mostraron con su canción “Me gusta ser una zorra”, que provocó la dimisión de Carlos Tena de su puesto en RTVE por difundir la canción en la cadena. “Nihil novo sub sole” –“no hay nada nuevo bajo el sol”- y, si no, que se lo pregunten a Pedro Sánchez, que es maestro en el arte del plagio. Según la Real Academia Española de la Lengua, es perfectamente posible que un término peyorativo obtenga matices positivos si la población decidiera cambiar su uso o su sentido, y Bas parece haber conseguido, tras unas pocas intervenciones televisivas, transformar un insulto en una expresión de moda, que has circulado cómodamente por todos los medios de comunicación. La cantante considera que ha logrado cambiar el aspecto negativo de la palabra ”zorra” y la gente ya la usa con total libertad y exclama sin complejos: ”Me siento zorra, súper zorra”. Tras alzarse con el micrófono bronce del Benidorm Fest, les dijo a sus seguidores: “Sois fabulosas y vamos a salir zorreando”. Para Eduardo Álvarez, la canción supone “empoderamiento femenino, liberación individual, canto a que cada cual se sienta como quiera, combate al edadismo: […] Todos somos zorras o hemos querido serlo”. Es un himno que trasciende con mucho lo musical y, toda vez que el jurado y el televoto habían perdonado a la vocalista de Nebulossa su falta de garganta y su notables limitaciones escénicas, cabía preguntarse si nos importaba más “zorrear” que intentar ganar. “Pues venga, zorreemos”.
Reacciones a la canción
A Sánchez parece haberle gustado la canción de marras y ha aprovechado gustoso la ocasión para practicar su deporte favorito de polarizar. Así, en una entrevista en la Sexta dijo que a la fachosfera no le gustaba “Zorra” porque prefería el ”Cara al sol”. Bueno, si me obligaran a elegir -y al margen de consideraciones ideológicas- no habría color entre el bodrio de Bas y un himno compuesto por poetas reconocidos como Agustín de Foxá, Dionisio Ridruejo, José María Alfaro, y Rafael Sánchez Mazas. A cada cual lo suyo. Para David Lema, en el muladar de la conversación pública, Sánchez ha conseguido situar a “Zorra” en zona de guerra civil, para enfrentar a los españolitos entre los que cantan el himno falangista -mitómanos empedernidos- y quienes recitan rompedorcísimos versos “woke”.El tiro, sin embargo, le ha salido por la culata, en opinión de Maite Rico, porque la canción ha soliviantado a connotadas feministas, incluso dentro de su propio partido.
Así, el Movimiento Feminista de Madrid publicó el 5 de febrero un comunicado titulado “Empoderamiento zorruno y exaltación del feminismo”, en el que manifestaba su rotunda queja por la elección de la canción para el Festival de Eurovisión y solicitaba su retirada, porque la composición insultaba a las mujeres de manera machista. Era un despropósito la pretensión de presentar el agravio de repetir insistentemente la palabra “zorra ” como empoderamiento de la mujer, y la letra de la canción resultaba una afrenta a la razón y al Movimiento de los Derechos de las Mujeres, y encima calificarla de feminista. El Movimiento llegó a las siguientes conclusiones, con las que concuerdo plenamente: 1) El insulto de “zorra” era violencia verbal contra las mujeres, a cuyas víctimas de la violencia machista se las maltrataba a diario utilizando esa palabra; festejar un término que suponía una humillación para la mujer era una fórmula de victimización pública. 2) En la canción se repetía hasta en 45 ocasiones el insulto de “zorra” dirigido a la mujer, y el significado de esta palabra formaba parte del arsenal básico de su menosprecio; la repetición intensiva del insulto convertía toda la composición en un vehículo de la misoginia. 3) Alegar que la canción suponía el empoderamiento de las mujeres era insultar a la inteligencia, pues su resultado era la banalización social de la injuria; asumirse como zorras y normalizar un agravio no empoderaba a ninguna mujer, sino que, antes al contrario, allanaba el camino a que las adolescentes asumieran como normal la perversa mirada machista sobre ellas y proporcionaba una coartada a los comportamientos machistas. 4) La promoción de la canción por parte de RTVE suponía la normalización del insulto a las mujeres en la sociedad, incluido el público más joven, y difícilmente se podría reconvenir a los escolares cuando insultaran a sus compañeras al llamarlas zorras si les estábamos asegurando que a ellas les gustaba y que eso era feminismo. 5) Este insulto a la mujer era contrario a los principios y valores que debían guiar a unos entes públicos de comunicación como RTVE y la Unión Europea de Radiodifusión.
El embellecimiento de la palabra “zorra” dirigida a una mujer con intención de insultarla es un flaco servicio a la causa del feminismo por quienes presumen de progresistas, como puso de manifiesto el atinado comunicado del Movimiento Feminista de Madrid. Es significativo el hecho que el diputado del PSOE en las Cortes de Castilla y León, Ángel Hernández, tuviera que dimitir de su cargo tras su detención por violencia de género contra su pareja. El diputado fue detenido por la policía cuando aporreaba la puerta de la casa de aquélla en Soria, mientras gritaba: “!Abre la puerta, zorra!’. Para los buenistas defensores de la canción, semejante improperio era solo un calificativo cariñoso que empoderaba a la agredida.
Según una encuesta realizada por Sigma-2 a raíz de la selección de la canción “Zorra” para que representara a España en el Festival de Eurovisión de Malmoe, el 52.9% de los encuestados -frente al 34%- se mostraron contrarios a dicha elección, 60.7% -frente al 26.5%- creía que la canción no empoderaba a la mujer, y 59.3% -frente a 28.1%- estimaba que no defendía el feminismo. Creo que son datos bastante evidentes de la oposición de la mayoría de la sociedad española a la trivialización que de las mujeres se hace en la canción seleccionada, porque -en vez de empoderarlas- las desempoderan y las dejan desprotegidas ante la violencia de género.
Jorge Bustos ha comparado el documental sobre la génesis de “We Are the World” con la final del Benidorm Fest, que ha desembocado en la selección de la canción ”Zorra”. Desmoralizaba el contraste del documental con la canción, “ese mundillo de egos irrelevantes en busca de atención inmerecida. De una causa real-el hambre- a otra impostada -el edadismo-, del Olimpo artístico al amateurismo vergonzante, de la toma de conciencia de los mejores a la egolatría de la vulgaridad, de un altruismo casi ingenuo al cinismo orgulloso, de la composición legendaria al plagio desorejado de las Vulpes, cuando la subversión sexual suponía atrevimiento”.
Conclusiones
El pasado verano publiqué un artículo en “Sevillainfo”, titulado “Zorras: Creciente sexualización de la sociedad y sus efectos sumamente nocivos en los adolescentes”, con motivo del lanzamiento en Antena 3 de la serie televisiva “Zorras”, en el que advertía de la excesiva sexualización de la sociedad y de su plasmación en series de la TV, que se emitían de manera normal en cadenas de información general en horarios de gran audiencia, que estaban al alcance incluso de menores de edad. En esta misma longitud de onda cabe situar la selección de la canción “Zorra” para que represente a España en el Festival de Eurovisión de Malmoe, que -como en el caso de la serie homónima- exalta una sexualidad equivocada y un regodeo en la vulgaridad y el mal gusto, que se pone de manifiesto en la presentación del espectáculo: una diva con voz cansina como consecuencia del paso de los años, escoltada por un par de robustos maromos, tatuados y travestidos con corsés y ropa interior femenina, lo que supone una actuación burda, soez, amoral y/o inmoral, ajena a cualquier canon de belleza estética o de principios éticos.
Los expertos televisivos tratan de ennoblecer este paupérrímo espectáculo con comentarios grandilocuentes. Así, Daniel Borrego ha afirmado en “RTVE Música” que la canción nos invita a reflexionar entre la libertad y la autoexpresión. Los automarginados de la sociedad encuentran en “Zorra” refugio y libertad para ser ellos mismos. Nebulossa nos llevaba de la oscuridad a la luz y y consagraba la libertad, la autenticidad y el amor (¿?).
Rico ha dicho entender a quienes les hace gracia la canción y a quienes abominan de ella, al rechazo feminista y a que a Nebulossa “se la bufe”, pero con lo que no podía estar de acuerdo era con los que intelectualizaban la canción, que no es transgresora ni empoderante, sino un artificio festivalero y oportunista sin mayor recorrido. “Que si ‘Zorra’ rompe moldes, que si es pluralidad y diversidad, que si da cultura, abre caminos y genera nuevas visiones… Como no sea la de los culos depilados de los dos tipos en corsé que acompañan a la cantante […] Que estarán muy bien, pero que no ameritan un análisis semántico”.
Se trata de una canción zafia y vulgar que ofende a las mujeres y al buen gusto. Por mucho que me insten Mary Bas y sus corifeos, no voy a “zorrear”, sino que -antes al contrario- criticaré el oportunista “zorreo” y me opondré a él en la medida de mis modestas posibilidades, tanto por razones éticas como estéticas.
Madrid, 8 de mayo de 2024
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